Trabajadores de la ONCE en Canarias protestan contra la "pérdida" de empleo y la retirada de kioskos

Actualizado: miércoles, 14 abril 2010 18:24

LAS PALMAS DE GRAN CANARIA, 14 Abr. (EUROPA PRESS) -

Trabajadores de la ONCE en Canarias protestaron hoy contra la "pérdida de derechos y de empleo" y la retirada de kioskos de venta, según informó a Europa Press el responsable de CCOO en el organismo en las islas, Antonio Melián.

"Ha bajado brutalmente la contratación de personas invidentes", reiteró Melián tras las protestas de delegados ante las sedes de la ONCE en Santa Cruz de Tenerife y en Las Palmas de Gran Canaria, al tiempo que acusó a CC de "vender los intereses de los trabajadores", al no participar en su "lucha".

El dirigente sindical hizo hincapié en que la ONCE está "perdiendo referencia de cara a la sociedad canaria". "Se ha dejado fuera un montón de trabajadores para volver a contratarlos con un 30 por ciento menos de salario, es decir, 666 euros. Esto es aberrante", aseveró.

En este sentido, recordó que la ONCE hace unos años cerró la agencia de Los Llanos de Aridane, en La Palma, recientemente la de Arucas (Gran Canaria) y La Gomera, el pasado día 1 de abril la agencia de Güímar, en Tenerife, y, además, alertó del cierre de la Agencia de Icod de Los Vinos y de la Laguna, también en esta isla.

POLÍTICA "ANTISOCIAL"

Los delegados de CCOO, junto a otros sindicatos y organizaciones políticas internas de la ONCE, se concentran hoy en todo el territorio nacional, para pedir un cambio en la "política antisocial y comercial de la entidad", que en opinión del sindicato está "hipotecando y empobreciendo el futuro de esta importante institución social, de interés público".

CCOO detalla y concreta la política antisocial, y comercialmente errática de la ONCE, en LA "pérdida del derecho de las personas ciegas a integrarse laboralmente a través de la venta de productos-ONCE".

Argumenta que la dirección de la entidad no las contrata, aduciendo que son "poco productivas, al tener mayores dificultades para ofrecer los productos de forma ambulante". Prueba de ello es que, en diez años, el número de personas ciegas afiliadas a la ONCE vendedoras del Cupón Pro-Ciegos, ha descendido desde los 14.716 hasta los 10.350, remarcó Melián.

Igualmente, denunció la "retirada progresiva y masiva de los quioscos de venta: avocando con ello a miles de personas a ejercer el trabajo a la intemperie, con agravamiento de las patologías asociadas a su discapacidad".

Indicó que prueba de ello es la instrucción dirigida por la Dirección General de la entidad a sus jefes de centro, marcando los criterios de rentabilidad mínima para retirar los quioscos, que alcanzan ya casi un millar (el 15% del parque total).

CIERRE DE CENTROS

Asimismo, criticó el cierre de centros y la pérdida progresiva de empleo en el territorio nacional y en las islas. Así, manifestó que en los últimos años esta situación afecta a casi un centenar en España, dejando sin presencia institucional provincias enteras como Soria, Zamora, Ávila o Teruel, con la correspondiente pérdida de empleo de personal no vendedor.

Agregó que en diez años la plantilla de personal no vendedor ha descendido desde 5299 hasta los 4555 y continúa descendiendo, produciéndose despidos "por causas objetivas" casi diariamente.

Además, apuntó la "discriminación salarial contra el personal vendedor de nuevo ingreso: por un acuerdo firmado por UGT, que impone al personal vendedor de nuevo ingreso un salario base de 666 euros mensuales, un 30% menor al resto".

"ERRÁTICA" POLÍTICA COMERCIAL

Aunque la Audiencia nacional ha desestimado recientemente el conflicto colectivo interpuesto por CCOO por este asunto, el sindicato lo ha recurrido ante el Tribunal Supremo, por considerar que no hay razones objetivas para tamaña discriminación.

El representante sindical considera "errática" la política comercial, que indica que "trae como consecuencia la sistemática disminución de ventas y pérdida de cuota de mercado, empobreciendo a la ONCE y al personal de ella dependiente".

Así, comentó que en diez años las ventas anuales totales han disminuido en 223,36 millones de euros (un -11,27%), a pesar de que el sector del juego ha crecido en un 36,61 por ciento y su cuota de mercado en este sector ha descendido en más de 3 puntos porcentuales (9,28% en 1999 frente a 6,5% en 2008), perdiendo sistemáticamente cuota a favor de Loterías y Apuestas del Estado.