Asociación Guarderías califica de "competencia desleal" el modelo municipal que terminará "cerrando centros"

LOGROÑO 23 Abr. (EUROPA PRESS) -

La reciente asamblea de la Asociación de Guarderías y Centros de Educación Infantil de La Rioja, integrada en la FER, ha decidido hacer pública su critica de "competencia desleal" en el modelo de guarderías que está estableciendo el actual equipo del Ayuntamiento de Logroño, con su alcalde Tomás Santos a la cabeza, "sin reflexionar sobre el daño que se hace a la empresa privada".

Esta red pública soportada con el dinero de los contribuyentes logroñeses supone una "gravísima amenaza para las empresas privadas, debido a que implicará con toda seguridad el cierre de varios centros y la destrucción directa de decenas de puestos de trabajo, que nos ha costado mucho crear", indicó la Asociación en un comunicado.

A pesar de las reiteradas peticiones de diálogo por nuestra parte, el Ayuntamiento de Logroño "no escucha las peticiones del sector, mira hacia otro lado, y ni tan siquiera se aviene a compartir un análisis de la situación y de las necesidades de plazas de las guarderías". Más bien al contrario, el Consistorio "quiere poner en funcionamiento una red pública que terminará siendo adjudicada a la gestión privada y cuyas instalaciones serán explotadas por la empresa privada", criticaron.

El Ayuntamiento "no ha estudiado el mercado, no ha preguntado sobre la situación de las actuales guarderías y no ha establecido una estrategia adecuada para desarrollar un modelo serio". El modelo "desleal" se puede apreciar en varios ejemplos. Son los casos de los proyectos de guarderías de El Arco y del Cubo y otros más que el Ayuntamiento tiene en cartera.

CASA CUNA

También se produce en el caso de la Casa Cuna, cuyo centro será adjudicado a una empresa privada en julio. Los criterios de adjudicación de las 114 plazas de guardería en este centro son "bastante arbitrarios y no favorecerán a las familias más desfavorecidas o con menores ingresos". Hay criterios de adjudicación como el de la proximidad al centro del solicitante.

Por otro lado, los precios establecidos en la casa Cuna para el curso 2010 y 2011, -325 euros mensuales en jornada completa hasta las seis de la tarde-, "no son precios asequibles o sociales, como vende el Ayuntamiento, sino precios de mercado, totalmente equiparables a los de las guarderías privadas" con la ayuda de las "chiquibecas". Queda claro que las guarderías "públicas" no son gratuitas y hay que pagarlas.

Los recursos públicos que está destinando el equipo de Gobierno municipal a la creación de infraestructuras públicas de nuevos edificios e instalaciones (2 millones de euros en El Arco) suponen un "auténtico derroche que terminarán pagando los ciudadanos".

Esta forma de gestionar el dinero de todos anticipa una "reducción drástica" de las chiquibecas, -ayudas municipales que el Consistorio otorga a las familias-, y que se van a ver "seriamente perjudicadas por falta de dinero en las arcas municipales, al haberse destinado los recursos a centros innecesarios".

En esta época de crisis económica, el "despilfarro municipal" en el modelo de educación infantil de 0 a 3 años castigará más aún a las empresas que han invertido su dinero en la adquisición de locales, adaptación de instalaciones y contratación de profesionales.

El modelo de guarderías del equipo de Gobierno únicamente responde a un "pretendido rendimiento electoral". "Son votos lo que el equipo de Gobierno quiere, además de justificar así su defensa a ultranza por lo público. Pero esta defensa termina siendo ficticia y engañosa en definitiva, ya que la pretensión de favorecer a las familias más necesitadas es falsa y se quiere realizar a costa de la inversión privada y del empleo. Pero el resultado y la realidad dejan al descubierto lo contrario", añadieron.

La Asociación de Guarderías y Centros de Educación Infantil de La Rioja exige al Ayuntamiento que "rectifique inmediatamente este modelo y que busque otras alternativas más prudentes y más sensatas con la situación de crisis económica". Una de esas alternativas es la de concertar plazas públicas en los centros ya existentes, sin tener que crear una nueva infraestructura. Actualmente, las guarderías están atravesando un momento delicado, con un 40% de las plazas libres y a disposición de las familias.

También reclama el sector que sea "más favorable al diálogo, que se siente en serio a hablar con los empresarios del sector, para que entre todos se pueda establecer un modelo que favorezca los intereses de todas las partes y no se lleve por delante el esfuerzo, el sacrificio que hemos puesto en nuestros centros y el empleo que hemos creado durante todos estos años". Sólo así, "haremos un buen servicio a las familias y compartiremos un modelo de educación tan importante para el futuro de nuestros hijos", concluyeron.