Un acusado que confesó que mató a un indigente y usó pegamento para humillarle sexualmente niega el crimen en el juicio

Entrada de la Audiencia Provincial de Madrid-
Entrada de la Audiencia Provincial de Madrid- - Europa Press TV - Archivo
Publicado: lunes, 2 diciembre 2019 12:22

La fiscal se queja de que el juicio se celebre con el acusado siguiendo la vista por videoconferencia desde una cárcel de Pontevedra

MADRID, 2 Dic. (EUROPA PRESS) -

Un acusado de matar en julio de 2016 a golpes a un indigente, a quien destrozó la cabeza con una piedra y humilló sexualmente con pegamento, se ha retractado en el juicio de la confesión que realizó cuando los agentes le detuvieron, negando los hechos que se le imputan y cambiando totalmente su versión.

Rodrigo S.L., de 28 años, se enfrenta a una petición fiscal de 29 años de cárcel por delitos de homicidio, integridad moral, incendio y lesiones. El procesado ha declarado por videoconferencia desde una cárcel de Pontevedra, una circunstancia por la que la fiscal ha manifestado su queja por vulnerar la Ley de Enjuiciamiento Criminal.

Cuando se le detuvo, el acusado manifestó a la Policía que había matado a un hombre por meterse con su perro. Sin embargo, ha negado este reconocimiento en la vista oral y ha manifestado que jamás estuvo en el parque de la calle Ronda de Toledo de Madrid, donde se cometió el crimen, y que nunca ha tenido perro.

"¿Usted comentó a la Policía que había matado a un hombre por meterse con su perro, que le llamó maricón y que le había metido pegamento en el ano?", le ha preguntado la fiscal, a quien le ha replicado que "no ha matado a nadie". "No, no, no", se ha limitado a replicar el encausado, que también ha negado haberle confesado el asesinato a su compañero de piso.

Según su relato, ese día salió para ir al poblado chabolista de Valdemingómez a por droga. Cogió un 'coche cunda' en la calle Embajadores y regresó a su vivienda. En su casa, se encendió un cigarrillo y se quedó dormido. Tras ello, se produjo un incendio en su domicilio. "Jamás quise matarles. Si sucedió algo, fue accidental", ha querido recalcar.

Uno de los policías que atendió a la víctima ha relatado que los vecinos alertaron de una fuerte pelea en un parque próximo al Rastro, indicando los testigos que un hombre con tez morena había golpeado a un mendigo con una piedra en la cabeza por "un tema de un perro".

El agente ha relatado que la víctima se encontraba muy grave, boca abajo, con los pantalones bajados y con un fuerte golpe en la cabeza, siendo trasladado al hospital. Los testigos de la zona indicaron que el agresor vivía por la zona y que iba en compañía de un perro.

HECHOS JUZGADOS

Según el fiscal, el acusado salió el 2 de julio de 2016 de su domicilio sobre las 22 horas y se dirigió al parque situado entre las calle Gasómetro y Ronda de Toledo. Una vez allí se situó en una plazoleta en la que se encontraban J.L.R.C., conocido como 'el Brasi' y J.P.G.D. junto con su perro 'Tempo'.

Poco después se inició un altercado entre el acusado y J.L.R.C. por motivos que se desconocen, en el curso del cual el primero comenzó a proferir gritos y propinar patadas al otro hombre.

En el momento de la agresión J.L.R.C. había ingerido una "gran cantidad" de bebidas alcohólicas y había consumido cannabis por lo que "tenía mermadas sus opciones de defensa", si bien al menos en una ocasión intentó levantarse y sujetarse a un árbol, "siendo nuevamente golpeado por el procesado".

De Souza Lago era "plenamente" consciente de la situación en que se encontraba el otro hombre y de las dificultades que comportaba su estado para reaccionar ante el ataque, "aprovechándose de dicha circunstancia para conseguir el propósito perseguido de menoscabar su integridad y acabar con su vida".

El acusado aprovechó el altercado para "con ánimo de humillarle y de menoscabar la dignidad de (*)", coger un bote de pegamento y se acercárselo a la víctima. "Seguidamente -añade la Fiscalía- le bajó los pantalones y los calzoncillos, le abrió los glúteos y le puso pegamento en el ano, dejándole allí tumbado en el parque con los pantalones bajados, malherido y a la vista de los ciudadanos que allí se encontraban".

De Souza permaneció junto a J.L.R.C hasta las 00:30 horas aproximadamente, "sentado en un banco de la plaza y observándole mientras estaba tumbado, momento en que tras advertir que había otras personas alertadas por lo que allí estaba sucediendo y que se acercaba un indicativo policial, decidió abandonar el parque para regresar a su domicilio".

La víctima ingresó en el Hospital Clínico San Carlos a las 2:05 horas del día 3 de julio de 2016, siendo trasladado a la unidad de enfermos críticos donde falleció a las 6:52 horas. El acusado regresó a su domicilio "en estado de gran nerviosismo". En la vivienda se encontraba H.V.C. medio dormido en la salita junto a la puerta principal y M.R.M.H. en su habitación ubicada al fondo, con salida al patio interior y próxima a la ocupada por el procesado.

De Souza se cercioró de que la puerta principal estaba bien cerrada y que no había nadie más en la vivienda. A continuación se metió en su dormitorio y provocó fuego en la papelera con la intención de prender toda la vivienda. Sobre las 2:00 horas el fuego originó la explosión del cristal de la puerta del dormitorio del procesado, despertándose M.R.M.H. a consecuencia del ruido quien acudió a despertar a H. V. C. y entre los dos trataron de sofocar el fuego con agua sin conseguirlo.

Otros vecinos del inmueble tuvieron que ser desalojados y sufrieron heridas de diversa entidad. El fuego provocado por el procesado fue sofocado por los Bomberos que se personaron con inmediatez pero Los desperfectos causados en la vivienda han sido tasados en la cantidad de 31.945,33 euros.