Alerta amarilla en la región debido al intenso calor

MADRID 5 Jun. (EUROPA PRESS) -

La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha activado la alerta amarilla en la Comunidad de Madrid debido al intenso calor que se soportará este fin de semana en la región, con temperaturas máximas significativamente altas que rondarán los 36 grados en puntos de las Vegas.

El fin de semana se presenta caluroso en toda la Península, especialmente en el centro, donde se esperan máximas de hasta 36 grados, aunque en la jornada del domingo los termómetros darán una tregua en el norte, según la predicción de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET).

Durante la jornada de hoy, los cielos en Madrid presentarán intervalos de nubes medias y altas, con nubosidad de evolución diurna por la tarde. Además, se prevén chubascos o tormentas débiles y aisladas, preferentemente en el área de la sierra. Respecto a los vientos, de dirección variable, soplarán flojos, con predominio de la componente sur por la tarde.

Las temperaturas se mantendrán sin cambios o experimentarán un ligero ascenso. Así, el termómetro oscilará en Madrid entre los 16 y los 35 grados; en Buitrago, entre los 12 y los 29; en Getafe, entre los 19 y los 35; en Aranjuez, entre los 16 y los 36; y en Navacerrada, entre los 13 y los 23 grados.

CONSEJOS PARA AGUANTAR BIEN EL CALOR

Ante la previsión de altas temperaturas, la Dirección General de Atención Primaria de la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid recordó que es necesario tomar medidas de precaución, especialmente entre los grupos más vulnerables, como niños, ancianos y enfermos crónicos.

Así, aconseja mantener una adecuada ingesta de líquidos y vigilar de forma especial a los niños y a los ancianos para que beban al menos un litro y medio de agua al día fuera de las comidas. Se deben evitar los paseos y el ejercicio físico en las horas de más calor (especialmente entre las 12 y las 17 horas) y procurar que las prendas de vestir sean de tejidos naturales, ligeras y de colores claros.

Es necesario prestar una especial atención en la elaboración y conservación de los alimentos, dado que el calor favorece la proliferación de bacterias que pueden producir problemas graves. Frutas y verduras para consumir en crudo deben lavarse cuidadosamente, añadiendo incluso unas gotas de lejía para uso alimentario y aclarando muy bien.

Los alimentos deben cocinarse bien, alcanzando un mínimo de 65 grados, especialmente si se han descongelado o mantenido un tiempo en la nevera una vez guisados. La descongelación debe hacerse siempre con tiempo suficiente en el interior de frigorífico.

Los alimentos no deben dejarse nunca a temperatura ambiente más de una hora y si vamos a preparar salsas con huevos crudos, como mayonesas, se debe preparar la cantidad justa para la comida y no guardar lo que sobre.

Las carnes deben hacerse completamente, lo mismo que los pescados, salvo que éstos se hayan sometido previamente a una congelación de al menos 48 horas, para evitar así la infección por anisakis. En cualquier caso, se deben extremar las condiciones de limpieza de todos los elementos que intervienen en la preparación de los alimentos y no usar nunca para un plato cocinado el recipiente en el que estaba en crudo.

También es importante proteger la piel de la incidencia del sol, utilizando cremas con factores de protección (FPS) superiores a 15, factor que debemos elevar si tenemos la piel clara y llegar incluso a cremas de pantalla total para los niños, que nunca deben estar expuestos al sol antes de cumplir tres años.