MADRID, 25 Sep. (EUROPA PRESS) -
La Asociación para la Defensa de la Sanidad Pública manifestó hoy su rechazo a la nueva zonificación sanitaria que la Comunidad de Madrid pretende implantar desde enero de 2007 argumentando que se ha planteado "intempestivamente y sin información ni discusión pública previa".
La entidad sostiene que la propuesta de la Consejería de Sanidad y Consumo responde al interés de "asignar población a clínicas privadas y a hospitales privados, como serán los que piensa inaugurar el próximo año, dejando a un millón y medio de madrileños sin hospital de referencia público".
"Aumenta de manera importante la deriva privatizadora de la sanidad madrileña -insistió-, pues anuncia como centros generales de referencia a hospitales de gestión privada y aún sin construir, como son los de Vallecas y San Sebastián de los Reyes, o ya en funcionamiento y gestionados por multinacionales extranjeras como la Fundación Jiménez Díaz, obviando centros públicos como el Hospital Gómez Ulla, que actualmente esta siendo infrautilizado de manera premeditada a pesar de que existe un concierto institucional y de las protesta vecinales al respecto".
Desde esta organización ciudadana se objeta que la propuesta "llega a destiempo, se basa en la improvisación y no tiene en cuenta los previsibles incrementos de población en la región". También advierte que "no corrige el actualmente elevado numero de pacientes por área y zona básica de salud, y aumenta de manera muy insuficiente el número de equipos de Atención Primaria".
"Sólo dos áreas de las nuevas previstas tienen menos de 230.000 habitantes", asegura la Asociación, mientras que la Ley General de sanidad fija un máximo de 250.000 usuarios. "Es previsible que, tras la aplicación de este nuevo mapa sanitario sigamos asistiendo a la masificación y deterioro galopante a que estamos acostumbrados en la Atención Primaria y hospitalaria de la Comunidad de Madrid", auguró.
AL MENOS 13 ÁREAS NUEVAS
Según la Asociación, el censo poblacional actual de la región haría necesario "crear al menos" 13 áreas sanitarias nuevas, mientras que la Consejería sólo plantea dos más, esto es, pasar de 11 a 15. Además, considera que, aun cuando se dice que cada área sanitaria va a tener un hospital, "no queda en absoluto claro si los hospitales cabecera de cada área van a tener las características de verdaderos hospitales generales".
Por otro lado, objetó que "no se han definido adecuadamente" las dotaciones de esos centros --"existe el riesgo de que un importante porcentaje de enfermos tenga que ser derivado a los hospitales de referencia, que son en esencia los actuales", dijo-- y que "el hecho de que una parte de esos hospitales tengan carácter privado con ánimo de lucro puede conducir a una selección de enfermos, de modo que los más complejos se deriven a los actuales hospitales públicos, aduciendo diversos pretextos".
La Asociación para la Defensa de la Sanidad Pública estimó que "alguna de las nuevas áreas va a tener una dotación de camas hospitalarias notoriamente insuficiente", como será el caso de la que tendrá como hospital de referencia el que se está construyendo en Vallecas (0,76 camas/1.000 habitantes), lo que "la condena a una presión asistencial insostenible e impide cualquier atisbo de calidad asistencial".
NO SUPONE AUMENTO DE LOS RECURSOS
Asimismo criticó "algunos cambios incomprensibles" derivados de la nueva zonificación como "el paso del Hospital del Niño Jesús al Área 1, que ya cuenta con un hospital pediátrico (el materno-infantil del Gregorio Marañón), dejando al área 2 (Hospital de La Princesa) sin recursos pediátricos".
La entidad concluyó que el nuevo mapa sanitario "no supone un aumento de los recursos sanitarios existentes pues simplemente reorganiza, sin asignar nuevas partidas presupuestarias conocidas a lo ya existente ni incrementar en la práctica el numero de profesionales asistenciales".
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