La capital y gran parte de la región vuelve a superar el nivel límite anual de contaminación en NO2

Actualizado: jueves, 24 febrero 2011 19:24

MADRID, 24 Feb. (EUROPA PRESS) -

La capital y gran parte de la región han vuelto a superar en las últimas horas el límite anual de contaminación de dióxido de nitrógeno (NO2), estipulado en 40 microgramos por metro cúbico, según datos de la red de vigilancia de la calidad del aire del Ayuntamiento y de la Comunidad de Madrid.

Así, ayer miércoles desde las 4 y hasta las 16 horas se superó esta barrera, con picos a las 8 horas de 108 microgramos y a las 9 horas de 104 microgramos. Entre las 16 y 17 horas bajaron las mediciones hasta que a las 18 horas aumentaron de nuevo los niveles, hasta alcanzarse a las 21 horas los 103 microgramos por metro cúbico.

Las mediciones de NO2 han continuado la misma tónica en el día de hoy. Por ejemplo, a las 16 horas, y según datos del Servicio de Calidad del Aire del Ayuntamiento, la media de la red anotaba 51 microgramos por metro cúbico. Las estaciones con más niveles han sido las de Avenida de Ramón y Cajal (79 mg/m2), Urbanización Embajada (67 mg/m2) y Plaza de España (65 mg/m2). Las que menos han sido las de El Pardo (17 mg/m2) y Casa de Campo (25 mg/m2).

En el resto de la región, y según los datos de la Red regional, hubo estaciones que registraron niveles elevados de dióxido de nitrógeno en las últimas horas. Así, las estaciones de Getafe, Leganés, Alcalá de Henares, Alcobendas, Fuenlabrada, Alcorcón, Coslada, Majadahonda, Collado Villalba y Rivas-Vaciamadrid superaron durante varias horas el día de ayer y hoy los 40 microgramos por metro cúbico.

Es el segundo episodio de alta contaminación en lo que va de año. A principios de este mes también se registraron altos niveles, por lo que el Ayuntamiento recomendó a los conductores que utilizaran el transporte público. La concejal de Medio Ambiente, Ana Botella, achacó esta situación al fenómeno de inversión térmicas, es decir, aquellos días del año en el que coinciden mucho tráfico, temperaturas agradables durante el día y frío durante la noche, que obliga a encender las calefacciones.

De hecho, tras las lluvias de mediados de mes la 'boina' de contaminación que cubría la capital se disipó y los niveles de contaminación cayeron. Ahora, las temperaturas agradables y la ausencia de vientos, que dispersan este contaminante, han vuelto a coincidir con el aumento de NO2.