Henríquez dice que ha intentado "defender un urbanismo razonable" y "no tenía sentido" no retranquear el edificio

Afirma que tienen la "conciencia muy tranquila" y que cree que si sigue adelante, se sobreseerá el caso

Íñigo Henríquez De Luna, En Rueda De Prensa
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Europa Press Madrid
Actualizado: miércoles, 18 abril 2012 14:16

MADRID, 18 Abr. (EUROPA PRESS) -

El exconcejal presidente de la Junta de distrito de Salamanca y actual portavoz del PP en la Asamblea de Madrid, Íñigo Henríquez de Luna, se ha referido este miércoles a su posible imputación por un delito de prevaricación en su etapa como concejal, y ha afirmado que él intentó "defender un urbanismo razonable" en el caso del solar de la calle Pilar de Zaragoza, 59, de la Guindalera, y ha considerado que "no tenía ningún sentido que un edifico de esas condiciones no se retranqueara".

"He intentado defender un urbanismo razonable. No tiene ningún sentido que los vecinos de una calle vean cómo el Ayuntamiento da decisiones radicalmente distintas a las mismas situaciones. A idénticos solares en una misma calle el resultado urbanístico y las posibilidades de construcciones de esas edificaciones tienen que ser similares", ha señalado.

"No pueden ser radicalmente contrarias", ha sostenido Henríquez de Luna en relación a la información que publica este miércoles el diario El País, sobre su posible imputación por un delito de prevaricación al no firmar la licencia de obras del edificio del número 59 de la calle Pilar de Zaragoza en el barrio de la Guindalera.

El 'popular, quien ha asegurado que tiene "la conciencia muy tranquila" y que cree que el caso será sobreseído en el supuesto de que siga para adelante, ha afirmado que "no tenía ningún sentido que un edifico de esas condiciones no se retranqueara".

El portavoz del PP también ha destacado que el ejercicio de la función pública "se tiene que hacer desde el compromiso público a los ciudadanos". "Uno está aquí para servir a los ciudadanos y no servirse de ellos", ha continuado Henríquez de Luna, quien ha explicado que el barrio de La Guindalera tiene "calles estrechas pequeñas y angostas" y "ese retranqueo permite haber conseguido unas aceras más razonables para que los vecinos puedan tener una mayor calidad de vida".

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