PP dice que la de Calvo fue una "comparecencia, más allá de las discrepancias que pudieran producirse, enriquecedora para el objeto de la comisión"
El PSOE dice que parece que Aguirre espera a que acabe la comisión para cesar a Granados
MADRID, 5 Mar. (EUROPA PRESS) -
Los grupos parlamentarios de PSOE e IU hicieron hoy valoración de la primera jornada de la comisión de investigación del presunto espionaje que se celebró ayer en la Asamblea de Madrid y que acogió las comparecencias de tres ex consejeros que ostentaron las responsabilidades de seguridad en anteriores gobiernos de la Comunidad y de un técnico de seguridad, y destacaron el "varapalo" que sufrió al estrategia defendida por la el Grupo Parlamentario popular después de que los comparecientes no admitieran que la Comunidad realizara labores de contravigilancia en épocas anteriores al Gobierno de la presidenta Esperanza Aguirre.
Después de una jornada en la que comparecieron el ex consejero de Gobernación del Gobierno del socialista Joaquín Leguina, Virgilio Cano; el ex consejero de Medio Ambiente en época de Alberto Ruiz-Gallardón, Carlos Mayor Oreja; el consejero que le sucedió, Pedro Calvo, y el técnico de seguridad Juan Carlos Durán, la portavoz socialista, Maru Menéndez, criticó que el PP quiso comenzar con personas que "no tenían ninguna vinculación con el objeto de la comisión" y consideró que "al PP le salió mal su estrategia porque los cuatro comparecientes pusieron de manifiesto que ninguna de las tesis que trataba de sustentar el PP eran ciertas".
"También el Grupo Parlamentario Popular sufrió un importante varapalo en lo que fueron las intervenciones, en especial la de Pedro Calvo", afirmó la portavoz en relación a las palabras de actual delegado de Seguridad y Movilidad del Ayuntamiento de la capital tachando de "ridículo" que le llamaran a comparecer. Así, consideró "más razonable" que el PP acabe con el "intento de ocultamiento" y de "intentar confundir al personal" y apostó por que se ocupen por las "noticias" que "cada día vinculan más a la Consejería de Presidencia, Justicia e Interior con la presunta trama de espionaje".
"Los datos ayer sobre la adquisición de motos y cámaras a cargo de la Consejería de Presidencia, Justicia e Interior ponen de manifiesto que la explicación de Granados es lamentable, no creíble y que el señor Granados debería haber cesado ya en su puesto como consejero", consideró. "Parece que la presidenta puede estar esperando al final de la comisión para cesarlo", apostilló.
Por su parte, la portavoz de IU, Inés Sabanés, señaló que la conclusión de la jornada de comisión de ayer es "el varapalo a la estrategia inicial del PP", y criticó que parecía que el Partido Popular "en base al pasado trataba de justificar una situación irregular del presente".
"Las cuatro intervenciones de ayer han supuesto un varapalo inicial a las tesis del PP de tratar de justificar cualquier actuación de hoy en base a una continuidad a lo que había pasado en otras legislaturas", destacó en relación a la presencia de los diferentes ex consejeros de la Comunidad con competencias en materia de seguridad. "El debate de antecedentes y estructuras distrae del fondo de la cuestión. Ese no es el debate, el debate es si en la época y en los gobiernos de Esperanza Aguirre desde las estructuras de seguridad y el funcionamiento de las consejerías se han podido producir irregularidades y actuaciones al margen del control político y judicial", destacó.
Asimismo, hizo referencia a las declaraciones de la presidenta regional de hace unos días en las que hablaba de comparativas entre las estructuras de seguridad y consideró que la estrategia del PP de analizar las diferentes carteras con competencias de seguridad a los largo de la historia de la Comunidad coincide con las declaraciones de la presidenta. "Exigimos que a partir de ahora nos centremos en las comparecencias y en la documentación", urgió.
Mientras, el portavoz popular, David Pérez, defendió la actuación de sus compañeros en las sesiones de ayer. Así hizo un "balance positivo" de ayer porque consideró que las cuatro declaraciones sirvieron para "sentar las bases con el rigor para estudiar lo que tiene que ver con el objeto de la comisión". Así, destacó que gracias a ellas se ha conocido la estructura de seguridad regional desde el 1987, cuando a su juicio, se creó una unidad de seguridad por parte del Ejecutivo autonómico, hasta 2002 momento en que "se refuerza" bajo el mandato de Gallardón.
"Aquí la única estrategia que ha quedado desautorizada es la del PSOE, que se siente más cómodo en acusaciones calumniosas que en trabajo riguroso de la comisión". "El PSOE prefiere las acusaciones y manipulación", reseñó.
Asimismo, dijo que la comparecencia de Calvo "aportó mucha luz sobre cómo a partir de 2002 se promueve una transformación profunda del servicio con la creación de nuevas unidades y un fortalecimiento a nivel funcional de ese servicio". Así, destacó que fue una "comparecencia, más allá de las discrepancias que pudieran producirse, enriquecedora para el objeto de la comisión".
MAÑANA, PRESUNTOS ESPÍAS
Mañana, la comisión de investigación acogerá al asesor de Seguridad de la Comunidad , Marcos Peña, y al subdirector general de seguridad operativa de la Dirección General de Seguridad e Interior, Miguel Castaño. A este respecto, al portavoz del PSOE indicó que ellos pidieron que el primero en comparecer fuera Marcos Peña porque el objeto de la comisión no es otro que tratar de esclarecer que sucedió con los presuntos espionajes al vicealcalde de Madrid, Manuel Cobo, al ex consejero regional, Alfredo Parda y al vicepresidente regional, Ignacio González.
Menéndez aseguró que las de mañana son comparecencias con "especial interés" porque son personas "que tienen que aportar mucha información" sobre la presunta trama de espionaje político. En esta línea, reseñó que la estrategia que siguió ayer el PP fue un "absurdo y patético intento de tratar de buscar responsabilidades en etapas anteriores" y de demostrar que había similares estructuras en materia de seguridad, hecho que, a su juicio, "nada tiene que ver con haber ordenado seguimientos a responsables públicos".
Así, consideró que se trata de una estrategia que "trata de desincentivar el interés informativo no trayendo a comparecer a personas que tiene que ver con la trama". "Mañana el interés es máximo", apostilló.
Preguntada por la estrategia que los socialistas seguirán en las sesiones de mañana, Menéndez no quiso desvelar nada de la línea que seguirán, pero apuntó que en la reunión de la Mesa que fija la siguiente remesa de diez comparecientes intentarán "proponer una secuencia lógica en las intervenciones de comparecientes". "Pero no esperamos nada", matizó inmediatamente después.
La portavoz de IU también tuvo palabras para la sesión de mañana y aunque tampoco quiso desvelar su estrategia, dijo que lo primer que tendrá que aclarar Peña es por qué fue contratado , qué hace exactamente, de quién depende, qué hace a diario, y si se hacen informes a quién se lo comunica.
Asimismo, se refirió a la segunda comparecencia de Miguel Castaño y destacó que tiene que aclarar lo mismo que Peña. "Parece que aparece nombrado como jefe en algunas de las informaciones sobre los partes de presunto espionaje", añadió.
Pérez tampoco desveló su estrategia de mañana y aseguró que lo que él quiere es que en la comisión "se analicen los asuntos desde el rigor y sin el apasionamiento secretario que el PSOE quiere imprimir a la comisión". En esta línea, instó a los grupos de PSOE e IU a que trabajen "en serio" y que dejen de hacer "acusaciones calumniosas".
Respecto de Marcos Peña dijo que se le atribuyó el supuesto liderazgo de un equipo de espías, e indicó que "es imposible porque ni siquiera estaba en la Comunidad en el momento de producirse los supuestos hechos".
