BRUSELAS, 15 Nov. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Ford Europa, Stephen Odell, ha revelado que la compañía ha recibido muestras de interés por parte de distintos actores para hacerse con la planta de Genk, en Bélgica, y mantener la actividad de estas instalaciones.
Ford anunció a finales de octubre su decisión de cerrar la planta de Genk a finales del año 2014, y de trasladar a la factoría valenciana la producción de los tres modelos que se ensamblan actualmente en la fábrica belga: el Mondeo, el S-MAX y el Galaxy.
Odell, en una entrevista con el diario belga 'L'Echo' recogida por Europa Press, explica que, dentro del proceso de negociación, Ford está totalmente abierto a negociar un plan industrial para las instalaciones de Genk.
En este sentido, reconoce que "diferentes actores han mostrado un interés en utilizar la infraestructura", si bien el directivo declina especificar de qué empresas se trata, argumentando que deben analizar las oportunidades con los sindicatos.
El máximo responsable de Ford en Europa recuerda que la empresa ha planteado el mantenimiento de la actividad en Genk durante dos años más, y asegura que la corporación es consciente de las implicaciones del cierre. "Asumiremos nuestras responsabilidades, este es el mensaje", añade.
