Prevé un Presupuesto "muy duro" porque deberá "aquilatar" el actual con las previsiones del Consejo Vasco de Finanzas para 2013
BILBAO, 16 Nov. (EUROPA PRESS) -
El presidente del EBB del PNV y candidato a lehendakari, Iñigo Urkullu, pide al Gobierno vasco en funciones que no adopte decisiones antes de que su Ejecutivo tome posesión, "que sean difíciles de revertir en el futuro". En este sentido, le reclama que no dé más pasos en infraestructuras ni acometa posibles licitaciones o contrataciones de carácter público de las que ha dicho tener conocimiento.
Además, Urkullu afirma que el proyecto de Presupuestos que presentará al Parlamento vasco será "muy duro" porque deberá "aquilatar" las cifras de las cuentas vigentes con las previsiones de ingresos del último Consejo Vasco de Finanzas, celebrado el pasado 23 de octubre.
En una entrevista concedida a ETB, recogida por Europa Press, Urkullu ha asegurado que el Ejecutivo en funciones ya mantiene contactos con el PSE para llevar a cabo el traspaso "en las próximas horas, en los próximos días".
Ha admitido que el traspaso suele ser "sensible" en temas "de comunicación e información", y, según ha adelantado, su formación aprovechará para pedir "algunas cosas" al Gobierno vasco, entre ellas, asuntos relativos a la gestión en los meses de noviembre y diciembre, "en puertas de la conformación de un nuevo Ejecutivo". "Que esta gestión de Gobierno sea lo más consensuada posible", ha dicho.
Según ha asegurado, es algo que le preocupa que se haga "bien" y sin que el Ejecutivo todavía del PSE-EE "tome decisiones que sean difíciles de revertir en el futuro". En este sentido, ha destacado que su voluntad es conformar su Ejecutivo "cuanto antes" y, "por lo tanto, que el Gobierno vasco actual sea consciente de que está en funciones".
Además, ha revelado que los componentes del equipo negociador de la formación nacionalista para esta cuestión son miembros de la propia Ejecutiva del PNV.
REPRESENTANTES INSTITUCIONALES
Urkullu espera que Bakartxo Tejeria, candidata nacionalista, sea la presidenta de la Cámara vasca, como es previsible "si no media pacto entre otras formaciones políticas que sume más de 27 parlamentarios".
También ha deseado una normal relación entre las formaciones políticas, de forma que la representación en al Mesa del Parlamento vasco se haga tomando en cuenta la representación que cada uno de los partidos tiene en la Cámara. Según ha indicado, "cuestiones de racionalidad" deberían llevar a otorgar al PNV dos representantes en este órgano.
Respecto a la petición del PP de que se evite la presencia de EH Bildu en la Mesa del legislatura, ha asegurado que "no es ése el juego" en el que está el PNV, que intentará "que la legislatura discurra con normalidad desde el principio".
El PNV ha admitido que su deseo sería disfrutar de una legislatura "absolutamente tranquila y cómoda", producto de una mayoría absoluta, algo que, ha reiterado que "no ha sido posible".
Para Urkullu, las acusaciones del resto de partidos de que la decisión de gobernar en solitario estaba tomada de antemano es "un ejercicio de escenificación". En su opinión, en el caso de EH Bildu, "apuesta por un modelo socioeconómico diferente" al de los nacionalista y, de forma previa, han anunciado que "no era posible un Gobierno de coalición con el PNV", por lo que sus reproches al PNV "no casa con lo que ellos han venido diciendo".
PSE Y EH BILDU
Preguntado por sus acusaciones de que PSE y EH Bildu buscarían acuerdo para "castigar pro castigar" al PNV ha aclarado que él "no habla por hablar y cuida mucho las palabras". Ha asegurado que, como presidente del PNV, tiene en su "bagaje" el conocimiento de "los movimientos del resto de formaciones políticas".
"No sólo de lo que es una constatación de acuerdos que se dan en otras instituciones, sino de los movimientos de las formaciones políticas y de saber interpretar hacia donde se conducen determinados partidos", ha argumentado.
En su opinión, es "evidente" una estrategia de "eso que se ha pretendido acuñar el 'eje de las izquierdas vascas' y 'las derechas vascas'". "Hay una estrategia para mí absolutamente falsa, maniquea, pasada de moda, pero que se ha acuñado también meses antes de la campaña electoral", ha indicado.
PRESUPUESTOS
Aunque ha dicho que también es "evidente" que el próximo Gobierno deberá iniciar el mandato con unos presupuestos prorrogados, pero que su deseo es gestionar 2013 "en función de los números del Consejo Vasco de Finanzas" celebrado 23 de octubre. El Gobierno del PNV deberá "aquilatar esas decisiones" del Consejo Vasco de Finanzas a un proyecto de presupuestos "que será muy duro".
No obstante, ha afirmado que "es posible" respetar cuestiones de carácter social como Educación o Sanidad gracias al "adelgazamiento de la estructura de la Administración", con la supresión de cargos, publicidad y otros recortes de gasto corriente, y una política de "reactivación económica".
En este punto ha apostado por "demorar infraestructuras o compromisos", proyectos que "pudieran estar en papel, en ciernes" y "diferirlos en el tiempo", pero "intentar implementar ayudas a las empresas".
En este punto, ha vuelto a pedir a "este Gobierno vasco que está en funciones, que no dé pasos en más infraestructuras". "Tenemos conocimiento de posibles licitaciones, posibles contrataciones, incluso adjudicaciones, en este último tramo de este Gobierno que, insisto, está en funciones", ha afirmado.
Por otra parte, el candidato a lehendakari ha dicho tener "clara" la estructura de su Ejecutivo, cuya estructura reducirá, "a un número de Departamento equis". Por el momento, no ha hablado con ninguno de los candidatos a integrar su gabinete y "nadie" conoce quiénes podrían ocupar las Consejerías, algo que se ha negado a desvelar.
