VITORIA, 31 Jul. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Senado, Javier Rojo, advirtió hoy a ETA de que no tenga "ninguna esperanza" respecto a un nuevo proceso de diálogo porque "con los terroristas no hay nada que hablar y están todas las puertas cerradas", de forma que su único destino es "envejecer en la cárcel".
Rojo participó hoy frente al Ayuntamiento de Vitoria en la concentración de condena por el asesinado de los guardias civiles Carlos Sáenz de Tejada y Diego Salvá Lezaun, que perdieron la vida en el atentado de ayer en Calviá (Mallorca). La ceremonia contó con la presencia del alcalde de Vitoria, Patxi Lazcoz, la directora de Atención a las Víctimas del Terrorismo del Gobierno vasco, Maixabel Lasa, y representantes de los partidos vascos.
Tras mostrar su rechazo al atentado y expresar su solidaridad con las familias de las víctimas, la Guardia Civil y el resto de fuerzas de seguridad, el presidente de la Cámara Alta advirtió de que "a los terroristas sólo se les puede decir que la estación de destino es la cárcel". "Allí acabarán porque no hay retorno, salvo que cumplan íntegramente las penas", añadió.
Rojo también se refirió a "quienes apoyan la violencia y están todo el día en la manipulación sobre lo que hay que hacer o no hay que hacer", a los que avisó de que "no hay recorridos cortos para acabar con el terrorismo". Asimismo, emplazó a quienes respaldan el terrorismo a que "se pongan en la situación" de las víctimas y de sus familias.
"Quienes apoyan la violencia son unos cobardes e indignos", manifestó, para apelar a continuación a "la unidad de los demócratas para que no haya atajo alguno en la lucha contra el terrorismo".
Rojo mostró su deseo de que "quede clara de una vez por todas" la necesidad de "dejar de usar las palabras en el sentido de lo que hay que hacer o no" respecto a ETA. "No hay que hacer más que lo que estamos haciendo, acabar con el terrorismo y dejarnos de si hay que hablar o no; no hay que hablar absolutamente de nada con los terroristas".
Rojo advirtió a los miembros de ETA de que "no tengan ninguna esperanza de que se abrirá alguna puerta (al diálogo), porque están todas cerradas con muchos candados y no se van a abrir". "El final de los terroristas es envejecer en la cárcel. Cárcel, cárcel y cárcel", proclamó.