MÉRIDA 30 Oct. (EUROPA PRESS) -
El director de la Oficina del Parlamento Europeo en España, Ignacio Samper Cimorra, destacó hoy en Mérida que los parlamentos autonómicos son la "clave de la subsidiariedad" en la Unión Europea (UE) y afirmó que tienen "todo el derecho en la producción de normas legislativas".
De esta forma, indicó que a través del Tratado de Lisboa, los parlamentos autonómicos tienen la "posibilidad" de sacar "tarjeta amarilla" o "tarjeta roja", es decir, que "cuando un tercio" de ellos "no estén de acuerdo con la legislación" que se lleve a cabo desde la UE o piensen que "no se respeta el principio de subsidiariedad", pueden "echar atrás esa legislación y volver a empezar".
El director de la Oficina del Parlamento Europeo en España hizo hoy estas declaraciones en un encuentro con los medios previo a su comparecencia en la reunión de la Comisión de Asuntos Europeos celebrada en la Asamblea de Extremadura.
Así, explicó que en esta comisión se debatirá acerca de "temas europeos", esencialmente sobre el Tratado de Lisboa, cómo afectará su entrada en vigor a los ciudadanos y cómo se pondrá en marcha.
Igualmente, Ignacio Samper Cimorra presentará hoy en la comisión la actividad que realiza la institución que representa en el Parlamento Europeo y sobre todo, añadió, esta reunión servirá para "darle un repaso" a la actualidad europea.
TRATADO DE LISBOA, EL "RETO"
Por otro lado, el director de la Oficina del Parlamento Europeo en España afirmó que el Tratado de Lisboa será "fundamentalmente" el "reto" a desarrollar en la Unión Europea (UE) de forma que una vez que se ponga en marcha se utilicen los instrumentos que ofrece para que "entre en vigor para todos los europeos".
Asimismo, indicó que hay que "empezar a funcionar con un presidente estable" de la UE, así como "con un alto representante en política exterior" y con un servicio de acción exterior que "va a ser una revolución" en esta materia a nivel europeo.
Además, Ignacio Samper Cimorra consideró "importantísimo" tener la Carta de Derechos Fundamentales para los ciudadanos europeos y el derecho de iniciativa ciudadana, ya que "un millón de firmas en Europa" pueden "decir aquello" que se debería hacer y que "no" se está haciendo.
Igualmente, señaló que hay que "empezar a aprobar las cosas por mayoría en vez de por unanimidad" con el fin de "evitar la parálisis" que ha tenido la UE "durante tanto tiempo". En definitiva, indicó que se trata de "unos retos de primera magnitud".
Por último, explicó que hay "muchas personas todavía que no saben" que este proyecto supondrá el "gran cambio de la UE", y aseguró que el Parlamento Europeo "es una institución que sale fortalecida" de este proceso, ya que contará con "mayor poder de codecisión" y "más materia legislativa".