MADRID, 6 May. (EUROPA PRESS) -
El juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón ha procesado a cuatro presuntos etarras por el atentado contra la sede del PSE en la localidad guipuzcoana de Lazkao que se registró el 23 de febrero de 2009, y que llevó a un joven cuya vivienda había quedado destrozada por la explosión a atacar con una maza la 'herriko taberna' de la localidad.
En un auto dictado hoy, Garzón procesa a Beinat Aguinagalde, Ugaitz Errazkin y Manex Castro por un delito de depósito de explosivos y otro de estragos terroristas y a Mikel Garmendia por colaboración con banda armada, ya que prestó una furgoneta de su propiedad a los miembros del 'comando' para que ejecutaran el atentado.
Los hechos se produjeron a las tres de la madrugada del citado día cuando los tres procesados prepararon un artefacto explosivo en una vivienda de Hernani (Guipúzcoa) y lo colocaron en la sede del PSE de Lazkao, situada en el número 27 de la calle San Prudencio. Antes de la explosión, Aguinagalde realizó una llamada avisando de la colocación del artefacto.
La bomba, que estaba oculta en una mochila, tenía entre ocho y diez kilos de explosivo con base de nitrato de amonio y aluminio (amonal) y multiplicador de alto explosivo (nitrometano). Al estallar, provocó daños valorados en 762.458,60 euros tanto en la sede del PSE como en una treintena de viviendas, que sufrieron la rotura de ventanas y la aparición de grietas. Asimismo, se registraron desperfectos tasados en 5.251,59 euros en vehículos que se encontraban aparcados en la vía pública.
Tras los hechos, Emilio Gutiérrez, un joven cuya vivienda había quedado destrozada por la explosión atacó con una maza la 'herriko taberna' de la localidad, por los que recibió calificativos como 'el héroe de Guipúzcoa' y 'el justiciero de Lazkao'. No obstante, también sufrió amenazas del entorno de la banda terrorista que le obligaron a abandonar el pueblo y fijar su residencia fuera del País Vasco.
ASESINATO DE URÍA
Aguinagalde, Castro y Errazkin están reclamados por la Audiencia Nacional, entre otras causas, por el asesinato del empresario Ignacio Uria, que se produjo el 3 de diciembre de 2008 en la localidad guipuzcoana de Azpeitia. También se les relaciona con la colocación el 16 de enero de 2009 de dos bombas-trampa en la localidad guipuzcoana de Hernani que iban a estar dirigidas contra agentes la Ertzaintza.
El primero fue detenido el pasado 28 de febrero en Cahan (Francia) junto al máximo dirigente de ETA Ibon Gogeaskoetxea y José Lorenzo Ayestarán Legorburu. Castro, por su parte, fue arrestado en marzo de 2009 en Villabona (Guipúzcoa) y Errazkin se encontraría en paradero desconocido.