Recalca que los compromisos internacionales han obligado a la reforma del Código Penal y resalta la vigilancia para terroristas y pederastas
MADRID, 23 Dic. (EUROPA PRESS) -
El Fiscal de Santiago de Compostela y miembro de la ejecutiva de la Asociación de Fiscales, Antonio Roma, ha reconocido que el "incremento de la población reclusa" ha sido "posiblemente" uno de los motivos que han provocado "el incremento de la dulcificación" de algunas penas en la reforma del Código Penal que ha entrado en vigor este jueves, aunque ha matizado que no ha sido ese el criterio principal que ha seguido el Gobierno para llevar a cabo las modificaciones en el texto.
Roma ha defendido que la rebaja de las penas para determinados delitos atiende principalmente a la necesidad de "adaptar algunas cuestiones de penalidad en la proporcionalidad que se puede exigir". Entre los delitos que han visto suavizada su condena a raíz de la puesta en marcha de la reforma, se encuentran aquellos relacionados con la salud pública, siendo el tráfico de drogas uno de los que más polémica ha suscitado. "Es verdad que sí ha significado una reducción de penas respecto de determinados delitos de narcotráfico" ha reconocido el fiscal en declaraciones a RNE.
La necesidad de adaptar el Código Penal español, "tanto al marco internacional como, sobre todo, al marco de la Unión Europea" para "uniformar los derechos penales de los Estados" es, según el fiscal, una de las razones fundamentales que han motivado esta reforma y que explican, en parte, el cambio en la duración y la dureza de las penas correspondientes a determinados delitos que, al contrario que los citados anteriormente, si serán más castigados con las modificaciones. "Había muchas obligaciones internacionales asumidas por España que yo creo que han hecho imprescindible esta reforma", sobre todos en "materia de protección de la infancia, tráfico de seres humanos, tráfico de órganos y terrorismo", ha apuntado.
TERRORISTAS Y PEDERASTAS, MÁS VIGILADOS
La reforma del Código Penal introduce como novedad la libertad vigilada para terroristas y delincuentes sexuales, medida de seguridad que podrá extenderse hasta un tiempo máximo de diez años y por la que el condenado podrá ser obligado a estar siempre localizable, a seguir tratamiento médico, o a participar en determinados programas formativos.
Para Antonio Roma, era "inevitable" que se endurecieran las penas para este tipo de conductas delictivas, ya "no sólo porque había una obligación interprofesional si no porque todos consideramos que estas conductas deben ser muy duramente perseguidas".
MÁS PROTECCIÓN EN LA WEB
El Fiscal de Santiago ha destacado además el impulso que en esta reforma se le ha dado a la "protección penal" ante delitos cometidos a través de la red, aumentando así la protección de las víctimas, sobre todo de las más vulnerables.
Es el caso del "grooming" o "ciber acoso infantil", una conducta "muy grave" a ojos de Roma, consistente en la utilización por parte de adultos de las redes sociales para acosar a menores de edad, y que desde ahora pasará a estar regulada, castigando de manera más severa al delincuente.
En relación a los delitos que tienen que ver con ataques informáticos, ha afirmado que "se está mejorando en conducta penal" y que "la dirección es buena" pero reconoce que siguen existiendo muchas dificultades para perseguir este tipo de conductas delictivas. "Muchas veces tenemos problemas prácticos evidentes cuando tenemos que solicitar la cooperación de las autoridades judiciales de otros Estado" ha asegurado.
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