Javier Rojo cree que otras cámaras legislativas se podrían sumar al Senado para habilitar enero y julio

Actualizado: jueves, 4 marzo 2010 16:18

CÓRDOBA, 4 Mar. (EUROPA PRESS) -

El presidente del Senado, Javier Rojo, consideró hoy que su propuesta de que enero y julio sean hábiles en la Cámara Baja es un "sentimiento" compartido por otros "ámbitos" de la "función pública". Rojo fue preguntado por la posibilidad de que otras cámaras y parlamentos autonómicos se animaran a seguir este ejemplo, y dijo estar "convencido de que hay un sentimiento de toda la función pública, como servidores públicos, de hacer exactamente lo mismo".

En este sentido, añadió que él no conoce "a nadie que se aparte de trabajar", y puso como ejemplo de ello a los alcaldes y concejales, que "están, desde que se levantan y hasta que se acuestan, dedicándose a la labor pública".

Apuntó que esto forma parte del proceso de "modernización" y de adaptación a las necesidades de la sociedad que ya se viene aplicando en el Senado y en otras instituciones democráticas, cuya labor hay que poner en valor, porque "despreciar la política y descalificar a las instituciones tiene una carga ideológica" antidemocrática, ya que, "si se devalúa la política, también se devalúa la democracia".

Por otro lado, abogó hoy en Córdoba por hacer política "para los afectos y no para la confrontación" porque "la política es el instrumento para resolver los problemas de los ciudadanos", que deben percibirlo así, comprobando que quienes ejercen la función pública están a su servicio.

En rueda de prensa, Rojo, quien mantuvo hoy en la capital cordobesa una reunión de trabajo con senadores, diputados nacionales y autonómicos del PSOE por Córdoba, para luego ofrecer en la Universidad de Córdoba (UCO) sobre 'El cambio político en Euskadi',

En este sentido, el presidente del Senado subrayó que, "si hace treintitantos años, aquellos que nos indicaron el camino de cómo había que construir España hubiesen estado en los discursos que se escuchan hoy, no hubiésemos avanzado ni un centímetro" hacia la democracia.

Por eso, Rojo sólo tiene "palabras de agradecimiento para nuestros mayores, que nos hicieron aparcar el rencor y pensar en la convivencia y en que construiríamos un gran país si éramos capaces de mirar al futuro y no estar permanentemente poniendo palos en las ruedas, para ver como se cae nuestro carro".

En consecuencia, ante la actual crisis económica, apeló "a la responsabilidad de empujar todos en la misma dirección", pues "ya tendremos tiempo de embroncarnos, de decirnos las cosas", porque ahora hay que "dar confianza a los mercados, a la sociedad y a nosotros mismos, porque tenemos que hacer política para los afectos y no para la confrontación".

"Hay que hacer política --prosiguió- para convivir, para compartir, para crear puentes, para no hacer trincheras, en definitiva, para que nuestros hijos y nietos se sientan orgullosos de nosotros", como él lo está de sus padres y sus abuelos, porque le enseñaron "a defender la libertad, a ser rebelde con causa y a respetar al adversario, porque ese es el único futuro que tiene un país, y eso es lo que hay que practicar hoy", empujando todos en la misma dirección ante la crisis

EUSKADI

De igual modo, Rojo señaló que hay que estar "orgullosos, como españoles", de lo que se ha conseguido desde la aprobación de la Constitución, aunque es "evidente que cada uno tiene que defender lo suyo, tanto los andaluces, como los vascos, los catalanes, los madrileños o los mallorquines, ahora bien, entendiendo que vivimos en un país que se llama España, que nos hace fuertes si mantenemos esa unidad defendiendo la diversidad de lo que es el país".

En este sentido y en relación con la conferencia que ofreció hoy en Córdoba sobre 'El cambio político en Euskadi', afirmó que el País Vasco "es una parte muy importante de España", a lo que se une "que no se pierde identidad, como vasco o como andaluz, defendiendo el propio proyecto y, a la vez, lo que te aporta, como español, el pertenecer a este gran país que es España".

Este es el cambio que se vive en Euskadi, donde "no se está perdiendo la identidad como vascos", a la vez que se sienten "profundamente orgullosos de pertenecer a España", porque es su "gran soporte y es el que ha estado aguantando todos estos empujones, por no decir otra cosa, en relación con el terrorismo, la intransigencia y el dogmatismo".