MADRID, 22 Mar. (EUROPA PRESS) -
El Pleno del Congreso de los Diputados rechazó hoy, con 284 votos en contra (PP y PSOE), once abstenciones (Coalición Canaria y PNV) y nueve votos a favor (ERC e IU-ICV), las enmiendas a la totalidad presentadas por los grupos de ERC e IU-ICV contra el proyecto de Ley de la Carrera Militar, que establece un nuevo modelo de formación militar, reduce el número de generales y estipula la obtención de títulos universitarios y educativos civiles para los oficiales y suboficiales al término de su etapa en las academias castrenses.
La norma, que pasa ahora a tramitación en la Comisión de Defensa de la Cámara Baja, fue defendida por el ministro, José Antonio Alonso, como "un paso ineludible" para la modernización de las Fuerzas Armadas, tras la aprobación de la Ley de Defensa Nacional y la de Tropa y Marinería.
El texto cosechó las críticas del PP, que aseguró que no es oportuno ni necesario y carece de "motivo objetivo", Izquierda Unida, que lo rechazó en fondo y forma y por no concretar aspectos importantes dejando su desarrollo al Ministerio y la cúpula militar, ERC, que aseguró que no va "por el camino progresista", Coalición Canaria, que lo consideró "muy deficiente" mientras que CiU incidió en que debe ser "muy mejorado" en su tramitación parlamentaria.
El ministro subrayó que el proyecto persigue que "garantizar la calidad y asegurar la máxima eficacia" en los Ejércitos y la Armada, par que puedan continuar cumpliendo "con excelencia" sus misiones constitucionales.
Así, defendió la creación de un nuevo modelo de formación castrense, con la obtención de títulos universitarios y educativos civiles, con un nuevo sistema de ascensos "más simple y racionalizado", un nuevo máximo de mandos fijado entre los 130.000 y los 140.000 efectivos y con la creación de una escala única de oficiales, todo ello con "el respaldo interno" de los Ejércitos y la Armada.
Alonso incidió en que "no hay discrepancias" sobre el fondo y los objetivos de la norma, por lo que llamó a los grupos parlamentarios a evitar la confrontación política y subrayó que el Ejecutivo y su grupo parlamentario asumirán las soluciones técnicas que puedan mejorar el texto en su tramitación en las Cortes.
PP: NI NECESARIA NI OPORTUNA
La Ley de la Carrera Militar fue duramente criticada por el Grupo Popular, que finalmente retiró su enmienda a la totalidad y hoy rechazó junto al Grupo Socialista las dos enmiendas de ERC e IU. Su portavoz, Asunción Oltra, aseguró que el proyecto carece de "motivo objetivo" que lo justifique y "no es oportuno ni necesario", toda vez que el Gobierno "cambia las expectativas de carrera" de los militares "por tercera vez" en los últimos quince años.
Oltra sugirió al Ejecutivo que podría haber entrado a modificar aspectos "puntuales" de la norma vigente, la Ley de Régimen de Personal, generando así "menos incertidumbre, inseguridad y frustración" y contribuyendo a "la consolidación" del modelo militar actual.
La portavoz 'popular' incidió en que el proyecto de Ley es "inoportuno" por la obligatoriedad de conseguir una titulación universitaria y alertó de que esta premisa podría hacer decaer la formación estrictamente militar en las academias castrenses. En ese sentido, subrayó que no se trata de una ley "de urgencia" y anunció que su grupo defenderá que se suprima la disposición sobre las reglas de comportamiento y que propondrá potenciar la figura del reservista voluntario para fomentar la cultura de la defensa
Finalmente, justificó la decisión de retirar la enmienda a la totalidad y no respaldar las dos que quedaban vivas por discrepar sobre los motivos esgrimidos por ERC e IU y porque que su formación aboga por el consenso y espera conseguir "un acuerdo que satisfaga a todos".
IU RECHAZA LA FORMA Y EL FONDO
El portavoz de IU-ICV, Gaspar Llamazares, justificó su "primera" enmienda a la totalidad contra una ley militar por su rechazo al "fondo" del texto, al considerar que no es "consecuente" con las dos normas precedentes, la de Defensa Nacional y la de Tropa, y achacó al Gobierno que haya llevado a cabo "un retroceso" en su política de Defensa, dejando las tropas "empantanadas" y en "situación de combate" en Afganistán, aumentando su presencia en la OTAN y adoptando "compromisos compensatorios" con EEUU, tras la retirada de Irak.
Llamazares manifestó también su discrepancia con la "forma" del proyecto de Ley aprobado sin debate previo con las fuerzas políticas y no siendo precedido por la Ley de Derechos y Deberes. El portavoz de IU recriminó al Gobierno el incumplimiento de ese compromiso, por el cual su formación apoyó la Ley de la Defensa Nacional.
Por último, criticó que la ley deje "demasiados temas" pendientes de desarrollo reglamentario, quedando, a su juicio, en manos del Ministerio y la cúpula militar e impidiendo su control parlamentario y reprochó al Gobierno que no haya buscando un consenso previo, queja ésta suscrita también por los portavoces de PP, Coalición Canaria, BNG y CiU.
UNA LEY "MUY DEFICIENTE"
Por su parte, el portavoz de Coalición Canaria, Luis Mardones, subrayó que el proyecto es "muy deficiente" tanto "por lo que dice" como "por lo que no dice" y justificó las más de 120 enmiendas parciales presentadas por su grupo. Mardones elogió la enmienda a la totalidad planteada por IU-ICV por la exposición "tan razonada" y "racionalmente sensata" realizada por Llamazares y reclamó un mejor planteamiento para una norma de la importancia de este proyecto.
El portavoz de ERC, Joan Puig, centró su rechazo a la Ley en que "se deja por el camino el compromiso social" y no va "en el camino progresista", al tiempo que criticó que el Ejecutivo no haya cumplido su compromiso de cesión del Castillo de Montjuic al Ayuntamiento de Barcelona.
El portavoz republicano supeditó la retirada de su enmienda a que el Ejecutivo adopte compromisos sobre dos puntos concretos, dos "compromisos sociales" solicitados por el Parlamento: el reconocimiento a los ciudadanos que lucharon durante la dictadura, reclutados por el servicio militar obligatorio, en el conflicto del Sáhara y Sidi Ifni y el cómputo del tiempo destinado a la 'mili' o la prestación social sustitutoria a efectos de seguridad social.
El portavoz del BNG, Francisco Rodríguez, criticó el mantenimiento en la norma de la disposición sobre la jura o promesa ante la bandera española, un acto, a su juicio, "teatral", "excesivo", "grandilocuente" y de "connotación muy españolista".
El portavoz del PNV, Iñaki Txueka, manifestó sus discrepancias sobre algunos puntos del texto legal pero optó por la abstención ante las enmiendas a la totalidad, mientras que CiU, por medio de su portavoz, Josep Maldonado, mostró su rechazo a devolver el texto legal pero defendió la necesidad de modificarlo con enmiendas parciales.
Maldonado consideró la ley "deficitaria", incidió en que debe ser "muy mejorada", recalcó que "le faltan cosas y le sobran cosas" y aseguró que su formación ha recibido "miles" de cartas de militares y familiares preocupándose por la situación en que quedarán tras la aprobación de la nueva norma.
El portavoz del Grupo Socialista, Jesús Cuadrado, dijo que la ley marca "el primer gran paso" hacia "las fuerzas armadas del siglo XXI" y da una respuesta a la situación actual "desde el punto de vista profesional".
Tras enmarcarla en "un ciclo reformista que no se podrá igualar" en materia de política de Defensa, Cuadrado se dirigió a Llamazares para recalcarle que el propio ministro de la Guerra en la Segunda República, Manuel Azaña, la habría respaldado y auguró que la norma conseguirá un "gran consenso" por contribuir a los "grandes objetivos" de las fuerzas armadas.