MADRID, 2 Feb. (EUROPA PRESS) -
El portavoz del Partido Popular en la Comisión de Exteriores del Congreso de los Diputados, Gustavo de Arístegui, afirmó este martes que la ausencia del presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, en la Cumbre Estados Unidos-Unión Europea del próximo mes de mayo, tiene que ver con que la asistencia de los presidentes de los EEUU en las cumbres "suele coincidir con la presidencia rotatoria de países de primer nivel". "Quizá es que a lo mejor, a pesar de haber sido invitado al Desayuno de Oración, no consideran a España en este momento, con este Gobierno, un país de primera", enfatizó.
En declaraciones a Onda Cero recogidas por Europa Press, explicó que le cuesta "mucho" pensar que el Gobierno de España no tuviera conocimiento de que Obama, cancelaría su presencia en la cumbre e indicó que habría que preguntarse si "esta prisa" del presidente del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, por tener "una foto alternativa" con Obama en el Desayuno de Oración que se celebrará este jueves, se debe a que el Gobierno ya sabía que se iba a cancelar la presencia de Obama en la cumbre EEUU-UE. Además, explicó que el portavoz de la Casa Blanca advirtió que "nunca estuvo en los planes de Obama acudir a esa cumbre".
En este sentido, en declaraciones a Telecinco recogidas por Europa Press, la portavoz del PP en la Comisión de Defensa, Beatriz Rodríguez Salmones, calificó este hecho de "desbarajuste" ya que "ni siquiera estaba en la agenda" de Obama asistir a la cumbre. Además, dijo lamentar que la valoración de España vaya "bajando" y que esto no es más que "una confirmación de ello".
Por otra parte, Arístegui se refirió al discurso del ex Primer Ministro británico, Tony Blair, en el Desayuno de Oración del año pasado y lo calificó de "extraordinariamente profundo" y de un "hondo contenido espiritual" que, a su juicio, sorprendió por "su profundidad y por su brillantez". Así, esperó que Zapatero "esté a la altura" este año.
Sobre el Desayuno de Oración, expresó que nada tiene que ver con el cristianismo ya que es "una cuestión de buscar puentes de entendimiento entre los políticos más allá de la política y de tratar de generar buenas relaciones personales en momentos de polarización política". Sin embargo, recalcó que "se ha tratado de quitar ese aspecto espiritual, ese aspecto de introspección" que, en su opinión, tiene este ejercicio porque "se estaba interesado en seguir preservando esa imagen laicista, que no laica, de Zapatero".
"La relación trasatlántica, normalmente en tiempos de crisis, de incertidumbre y de inseguridad como es claramente el caso y esta década que llega, tiene que fortalecerse. Es decir, las democracias que tenemos principios y valores comunes tenemos que tener mucho más cercanas nuestras posiciones en estos momentos de crisis", subrayó.
