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MADRID, 9 Oct. (EUROPA PRESS) -
El primer hombre que se sentó a negociar con la banda en la etapa de UCD, Angel Ugarte, consideró hoy "absurdo" que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, se dedique a promocionar la Alianza de Civilizaciones cuando ha sido "incapaz" de crear un consenso dentro de España sobre cómo abordar la posibilidad de terminar con ETA.
En declaraciones a Telemadrid recogidas por Europa Press, manifestó no entender tampoco que Zapatero haya traído a España al primer ministro británico, Tony Blair, para que éste le apoyara públicamente en el proceso iniciado para terminar con la banda, cuando los socialistas le criticaron por su posición en la guerra de Irak.
También criticó el debate que el Parlamento Europeo realizará el próximo 25 de octubre sobre el llamado 'proceso de paz' porque supone "internacionalizar el conflicto", una de las reivindicaciones históricas de los etarras.
Para el representante del Gobierno en la primera reunión entre una rama de ETA y el Gobierno español, en 1976 en Ginebra, la creación de una mesa de partidos donde abordar los aspectos políticos del conflicto vasco supondría "indudablemente" otra victoria para ETA.
Asimismo, manifestó tener la impresión de que el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero no parece tener una idea "muy clara" de "por dónde va a seguir" y aseguró que las exigencias de la banda son "exactamente" las mismas que hacía hace 30 años. Además, denunció no ver por parte del Ejecutivo una "reacción proporcional" a la "gravedad" de los últimos incidentes de 'kale borroka'.
EL GOBIERNO HA CAMBIADO DE ACTITUD
Según el entonces jefe de los servicios secretos en el País Vasco, lo que ha cambiado es "la actitud del Gobierno" con respecto al terrorismo de ETA, algo que ésta "ha aprovechado sacando un beneficio extraordinario". Ugarte aseguró que la negociación que entabló él con la banda fue distinta a la que se plantea en estos momentos porque en aquel momento se accedía a negociar con la banda "a iniciativa" de ésta.
Ugarte reconoció que el Gobierno de UCD nunca se hizo ilusiones de acabar con ETA, sino que su objetivo era "luchar" contra ella. Además, se mostró convencido de que la banda no tiene voluntad de dejar las armas ni siquiera en el caso de que se accediera a sus reivindicaciones.
Por otra parte, señaló que, bajo su punto de vista, en ETA no existen dos posiciones distintas: una más dispuesta a la negociación, que estaría encabezada por Josu Ternera, y otra más dura liderada por Garikoitz Aspiazu, 'Txeroki', aunque no descartó la existencia de "tensiones" en el seno de la organización entre los militantes encarcelados, algunos esperanzados con una posible salida de prisión, y otros como Francisco Javier García Gaztelu, 'Txapote', que siguen actuando de forma "radical" durante la celebración de los juicios.
Preguntado por el chivatazo policial que dio al traste con una operación contra la red de extorsión de la banda, consideró "muy difícil" que fuera una iniciativa personal de un policía e indicó que, bajo su punto de vista, se trataría de una decisión adoptada "a un cierto nivel" en la escala de mandos.
