MADRID, 16 Mar. (EUROPA PRESS) -
El vicesecretario general del PSOE, José Blanco, destacó hoy la importancia de la próxima cumbre que reunirá a los países del G-20 en Londres, de la que saldrán "nuevos compromisos" para hacer frente a la crisis internacional, y aseguró que los socialistas quieren que esta cita sea "el punto de inflexión en la lucha contra la crisis"
"Estamos seguros, lo está el Gobierno de España y lo está el PSOE, de que lo que resulte de la cumbre de Londres marcará la agenda de la política económica durante los próximos meses", afirmó Blanco en rueda de prensa, tras la reunión de la Comisión Ejecutiva Federal.
Blanco subrayó que en esta cita, que para la Ejecutiva socialista es "muy positiva", se van a "desarrollar" los acuerdos alcanzados en la anterior cumbre de Washington, se van a "fijar nuevos objetivos" y se va a avanzar para "establecer un nuevo marco y un nuevo sistema económico y financiero internacional". "Es verdad que la cumbre nos va a poner también a nosotros nuevas tareas", aseguró.
Además, el 'número dos' de los socialistas destacó la importancia de que España "haya consolidado su presencia" en la próxima cita del G-20, un "hecho sin precedentes" y "muy positivo para los intereses de España y para el papel que España desarrolla en el mundo".
En concreto, recalcó que "por primera vez", España ha participado en las reuniones preparatorias "de forma muy activa", a través del vicepresidente económico, Pedro Solbes, presentando la "visión" y las "propuestas" de España para "superar este periodo de graves problemas y sentar las bases de un futuro mejor".
SIN APOYO DEL PP
Y mientras tanto, lamentó, durante todo este tiempo el PP no ha hecho "ni una propuesta ni una sugerencia novedosa", que el Gobierno "hubiera tenido en cuenta". Por el contrario, afirmó, el PP "está más entretenido en otras cosas que en hacer propuestas positivas para el interés del mundo y para el interés de los españoles".
Preguntado por si el Gobierno se ha tomado como un aviso las manifestaciones del fin de semana en Barcelona contra la gestión de la crisis económica, Blanco aseguró que tanto el PSOE como el Gobierno "siempre han sido muy sensibles a la voz de los ciudadanos" y expresó su comprensión porque en épocas de dificultad "exijan a los gobiernos".
Dicho esto, subrayó que la "garantía" del Ejecutivo socialista es "garantizar el gasto público que permita a su vez mantener el compromiso social en un momento de dificultad para que nadie quede tirado".
Sin embargo, dijo, si el PP hubiera gobernado y "hubiera aplicado" sus "recetas" y su "plan oculto que no se atreve a decir a los ciudadanos", además de una crisis económica, habría "una crisis social". "Por eso somos sensibles a la voz de los ciudadanos, pero a su vez les queremos transmitir garantías de que no recortaremos gasto social", afirmó.
En este punto, Blanco aprovechó para "responder a una demagogia" sobre los recursos del fondo de inmigración y aseguró que, aunque "es verdad" que la partida del Ministerio "se ha reducido una parte", en la "negociación autonómica" para este año se contempla "tener en cuenta el fenómeno de la inmigración para dotar de más recursos a las Comunidades Autónomas donde el peso de la inmigración sea mayor" y, en concreto, "se va a destinar en el nuevo modelo de financiación autonómica 450 millones de euros".
