MADRID 16 Abr. (EUROPA PRESS) -
Tropas españolas y afganas llevaron a cabo el pasado fin de semana una operación contra la insurgencia en la provincia de Badghis, que se ha saldado con dos militares afganos muertos y que ha dejado daños en algunos vehículos españoles por impactos de munición, ha informado este martes el Estado Mayor de la Defensa en su página web.
La operación tuvo lugar el pasado fin de semana en los valles de Garmak y Kargas Gol, situados en las proximidades de Ludina, donde España mantuvo un puesto avanzado de combate hasta finales de febrero. Poco después, también se cerró el segundo puesto avanzado en esta provincia, en Moqur, de manera que en la actualidad las tropas españolas permanecen en la base de Qala-i-Naw, donde siempre ha estado el grueso del contingente.
Según ha informado Defensa, el objetivo de la operación, que han liderado las Fuerzas de Seguridad Afganas, era "mantener y ampliar los logros en seguridad en la zona". Militares y policías afganos han asumido ya la responsabilidad de las tareas de seguridad en la provincia, aunque siguen contando con el asesoramiento de las tropas españolas, que mientras tanto están ya en plena operación de repliegue.
Durante el sábado, se produjeron ataques contra unidades de las fuerzas afganas, que sufrieron incluso un ataque con un artefacto explosivo improvisado (IED) que dejó un muerto. Una compañía del Ejército español --la Task Force 21-- apoyó a las unidades hostigadas, señalando las posiciones enemigas y realizando fuego de mortero contra los insurgentes.
Además su célula de estabilización atendió en primera instancia a dos heridos de las fuerzas afganas, hasta que pudieron ser evacuados. Las operaciones fueron apoyadas desde el aire con los vehículos no tripulados 'SCAN EAGLE' y 'RAVEN'. No se ha informado de que en esta operación hayan participado los helicópteros de ataque españoles 'Tigre', en Afganistán desde hace unas semanas.
Tras pasar la noche en una base de patrullas, en la mañana del domingo continuaron los ataques. En uno de ellos, las tropas españolas fueron objetivo de fuego de granadas RPG por parte de un número desconocido de insurgentes. La 'task force' respondió con fusiles y morteros.
TRES INSURGENTES MUERTOS
Según ha informado Defensa, los únicos daños que han tenido que lamentar las tropas españolas es el de algunos vehículos, con "impactos de munición que están pendientes de evaluar". El balance de bajas entre las Fuerzas de Seguridad Afganas es de dos muertos y tres heridos. Entre los insurgentes se han confirmado tres muertos y cuatro heridos.
Con esta operación y las anteriores se comprueba que la Brigada afgana desplegada en la provincia de Badghis, que está asesorada por los españoles, planea y ejecuta sus operaciones "en una forma lógica", asegura el Estado Mayor, que explica que el empleo de su artillería es "frecuente" y sus equipos de desactivación de explosivos (EOD) "funcionan con normalidad, prueba evidente de su mejora".
Mientras tanto, las unidades españolas continúan con las acciones de repliegue. De hecho, este mismo fin de semana se realizó una operación helitransportada para dar seguridad, en la zona del paso de Sabzak, al convoy Charlie, con el apoyo en transporte de una unidad logística norteamericana. En concreto, en el convoy se transportaron cerca de 35 contenedores conteniendo diverso material de campamento, herramientas y repuestos.