BRUSELAS, 23 Jun. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, ha desoído en el primer borrador de prioridades para la próxima Comisión tanto las peticiones de los socialistas, que reclaman flexibilizar el Pacto de Estabilidad para relajar la disciplina fiscal, como las del primer ministro británico, David Cameron, que quiere repatriar competencias de la UE.
El documento preparado por Van Rompuy para la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de esta semana -en la que está prevista que se elija al candidato del PP europeo, Jean-Claude Juncker, como sucesor de José Manuel Durao Barroso- apuesta por dar continuidad a las políticas actuales de la UE y no incluye ninguna novedad o cambio relevantes, ni tampoco medidas concretas.
"A medida que la Unión está saliendo de la crisis, se necesitan medidas audaces en materia de reformas estructurales y una agenda positiva de crecimiento, competitividad y empleo. Esto debe basarse en el seguimiento de una consolidación fiscal diferenciada y favorable al crecimiento, en línea con el Pacto de Estabilidad, y en la aplicación de reformas estructurales en los Estados miembros", se limita a indicar el documento de Van Rompuy, publicado por el periódico británico 'The Telegraph'.
Tanto los socialistas europeos en la Eurocámara como el primer ministro italiano, Matteo Renzi, habían exigido como condición para apoyar a Juncker, flexibilizar el Pacto, excluyendo algunos gastos, como la inversión productiva, del cómputo del déficit y dando más tiempo a los Estados miembros para alcanzar el equilibrio presupuestario. El documento no menciona nada de esto.
La incógnita ahora es si la oferta de Van Rompuy, que se limita a repetir las declaraciones del Consejo Europeo en los últimos meses, será suficiente para inclinar el voto socialista a favor de Juncker. El grupo popular en la Eurocámara ya ha dejado claro que no aceptará flexibilizar el Pacto de Estabilidad, que es una "línea roja" en las negociaciones. También se oponen, entre otros, Alemania y España.
Por lo que se refiere a las demandas de Cameron, el documento de Van Rompuy tampoco aporta grandes novedades, más allá de una declaración de principios y de un propósito de reforzar el papel de los parlamentos nacionales en el entramado institucional de la UE.
DIFERENCIA REAL PARA LA VIDA DE LOS CIUDADANOS
"La UE debe concentrar su acción en aquellas áreas que supongan una diferencia real en la vida diaria de las personas y empresas y contribuir a una sólida agenda de reformas. Debe ser eficaz y proporcionar valor añadido. En línea con el principio de subsidiariedad, la Unión debe intervenir cuando pueda lograr más que los países individuales por sus propios medios. Cuando las autoridades nacionales están mejor situadas para obtener resultados, la Unión no debe intervenir", afirma el texto.
"Debe darse un mayor espacio a los parlamentos nacionales, incluyendo mediante el refuerzo de sus medios para participar en el debate y hacer que su voz sea escuchada en el procedimiento de toma de decisiones", propone Van Rompuy.
Cameron está dispuesto a pedir que se proceda a una votación si finalmente Van Rompuy propone a Juncker, según informa la prensa británica. Sería la primera vez que un presidente de la Comisión no es elegido por unanimidad, si finalmente los socialistas le apoyan.
En cuanto al resto de prioridades, el documento apuesta por reforzar la lucha contra la pobreza y la exclusión social y el abandono escolar temprano; propone crear una unión energética para que la UE pueda negociar de forma colectiva contratos con países como Rusia; y defiende elaborar una política migratoria común basada en la solidaridad y la responsabilidad.
