Actualizado 02/06/2010 14:00

Esther Esteban.- Más que palabras.- La generala Chacón y el Corpus en Toledo.

MADRID, 2 Jun. (OTR/PRESS) -

Ha perdido su estrella y ya nadie en el partido ve en ella a la mujer valiente y decidida, a la que antaño dibujaban como una firme candidata a suceder a Zapatero. Queda lejos, en el recuerdo, su imagen como la representación en carne viva de la renovación del PSOE, la mujer de verbo de oro que llegó a la ejecutiva del partido con una doble consigna "caña y sonrisa". Esa que podría haber logrado el milagro de la reconciliación entre el PSC y la calle Ferraz y a los que muchos auguraban una carrera imparable..La ministra Carmen Chacón tenia una espontaneidad innata y una basta cultura que irradiaba hacia adentro y hacia fuera. Con ella te podías pasar horas que parecían minutos, desarrollando esa vieja idea de Manuela de Madre de que el principal problema de las mujeres es como el de los caracoles " que andan siempre con la culpa cargada a la espalda "o hablando de poesía y prosa poética del desamor, que ella escribía en sus noches de insomnio. Era una mujer extremadamente exigente con ella misma, pulcra y amable en su relación con la prensa, que jamás dejaba una llamada sin responder aunque fuera a ultimísima hora del día.

Ahora la ministra Chacón se ha vuelto huidiza, arisca, desconfiada y reservada. Sólo se deja entrevistar por los medios afines y por periodistas complacientes y funciona a golpe de corneta y Real decreto. Se le ha puesto cara y gesto de generala a la antigua usanza, del peor estilo y cada día que pasa está más aislada en su despacho ministerial, donde apenas se relaciona con unos cuantos colaboradores, antes de cesarlos. Ha perdido por completo esa sensibilidad y cercanía a los ciudadanos donde antaño radicaba el secreto de su éxito. Ya sólo es noticia cuando rompe moldes con el modelito de turno, es desmentida por su jefe de filas por sus improvisaciones con nuestras tropas en el extranjero o recibe una sonora pitada como ocurrió hace días en Extremadura.

Da la sensación de que primero piensa en ella y luego en ella misma, en una incursión intimista, sectaria y políticamente equivocada. De no ser así, no estaría poniendo en serios apuros a sus compañeros de partido o, al menos, no se enterarían por el BOE de sus decisiones sin previo aviso. Tal ha sido el caso de no permitir que los militares de la Academia de Infantería de Toledo rindan honores a la salida de la Custodia en la procesión del el día del Corpus, la fiesta grande de la ciudad o de impedir que se toque el himno nacional. Soy toledana, me siento orgullosa de mi tierra y sigo viviendo en esa maravillosa ciudad, que dicen es de la tolerancia . En mis 50 años jamás he dejado de acudir a mi pueblo el día de la fiesta grande y aunque no soy de las que se envuelven en la bandera o sienten una emoción inconmensurable con los himnos, -sean del tipo que sean- ni se me eriza la piel con las marchas militares, si soy una gran defensora de las tradiciones que hacen vibrar a mis paisanos y me siento feliz participando en ellas..

El Corpus de Toledo y su procesión no se entiende sin los toldos que engalanan las calles, el olor a tomillo y romero, las cofradías y tampoco ..sin la participación de los cadetes de la Academia de infantería. Tal vez la ministra Chacón no sepa de qué tamaño es el "pellizco de monja" que le ha dado a su compañero de partido, el socialista Emiliano García Paje, ni tampoco la faena que le ha hecho a su amigo personal José María Barreda a quienes la noticia ha pillado " in albis". El alcalde de Toledo, consciente de que la decisión puede costarle el cargo (las anteriores elecciones las ganó el PP y él gobierna gracias al apoyo de IU) ha decidido que sea la banda municipal y la policía local quienes rindan honores, en un intento de maquillar el desaguisado. En cuando a José María Barreda, que según las encuestas tiene serias dificultades para mantener el gobierno en la región, lo único que le faltaba es que sean los propios quienes le pongan chinas en el camino, con las elecciones a la vuelta de la esquina. Supongo que aunque ambos se tengan que cuadrar ante la compañera generala Chacón pensaran aquello de ¡ al suelo que vienen los nuestros ¡. Ella ha perdido su estrella y ellos* se pueden estrellar por ella. ¡ que grave error ¡

La ultima se la ha hecho a Emiliano Garcia Paje, alcalde de Toledo y a José Maria Barreda, presidente de Castilla-La Mancha.