Actualizado 21/12/2010 13:00

José Cavero.- AENA y controladores reanudan el diálogo.

MADRID 21 Dic. (OTR/PRESS) -

Los controladores vuelven a tener protagonismo, también, esta nueva semana, tras el elevado grado de presencia social que han tenido en las tres últimas semanas. Después del plante del 3 de diciembre, y de la militarización y decreto de estado de alarma que viven desde entonces los controladores, la empresa propietaria de los aeropuertos, AENA, y el sindicato de controladores abren este lunes una nueva etapa en el proceso de diálogo que los mantiene enfrentados y que fue el detonante del caos aéreo que se produjo en los aeropuertos españoles en el inicio del pasado Puente de la Constitución. La Unión Sindical de Controladores Aéreos (USCA) y AENA (que depende del Ministerio de Fomento) se reunirán para fijar un nuevo calendario de negociación que, confían, tendría que desembocar en el acuerdo de un nuevo convenio colectivo para el sector. Los puntos en que arrancan las negociaciones son muy distantes, y está por ver la voluntad de entendimiento que se llega a producir en los próximos días, tras las manifestaciones de buena voluntad expresadas por la mayor parte de los controladores, de las que el Gobierno se fía poco...

Aunque las negociaciones se intensificarán a lo largo de esta semana, AENA ya ha manifestado que el encuentro de este lunes es "un primer contacto" para ver "hasta qué punto se retoman estas conversaciones", y si se superan las desconfianzas de uno y otro lado de la mesa. Los controladores, por su parte, han asegurado en un comunicado que se trata del "camino adecuado para recuperar la concertación y el diálogo social frente a un colectivo que ha sido organizado "manu militari" mediante sucesivos decretos y leyes en los últimos meses". La semana pasada, el Congreso de los Diputados aprobó la prórroga, hasta el 15 de enero, del estado de alarma decretada en plena crisis aérea. El Gobierno apoyó la solicitud de esta ampliación argumentando que "el sistema aeroportuario español aún no está normalizado" y que las "circunstancias que provocaron" la declaración de alarma inicial aún están vigentes. Sólo un día antes, el 85 por ciento de los 2.471 trabajadores que forman la plantilla de controladores en España firmaron un documento en el que se comprometían a no realizar una nueva huelga si el Gobierno levantaba el estado de alarma. Pero el Gobierno no se termina de fiar, tras el plante del "puente" de la Constitución. A pesar de esa desconfianza, expresada en la prórroga del estado de alarma, el sindicato de controladores USCA cree que su escrito ha surtido efecto y ha ayudado a que, "de una vez por todas, sea la negociación y el diálogo lo que se imponga frente a mecanismos excepcionales".

Ahora queda por ver si hay avances -en primer lugar, si hay voluntad de avanzar- entre los negociadores.

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