MADRID 14 Oct. (OTR/PRESS) -
Tras el desarrollo del desfile militar de este martes, en el Paseo de la Castellana de Madrid, el Gobierno ha decidido convocar a todos los grupos parlamentarios para consensuar un protocolo de celebración de la Fiesta Nacional del día 12 de octubre que permita el "respeto" a la bandera de España, a los caídos y a las Fuerzas Armadas, después de que el presidente del Gobierno fuera abucheado y silbado, por quinto año consecutivo, durante el desfile militar. La ministra de Defensa, Carme Chacón, ha sido quien ha anunciado este miércoles que el Gobierno va a convocar a todos los grupos parlamentarios para consensuar un protocolo de celebración de la Fiesta Nacional. En declaraciones a los periodistas, tras asistir a un desayuno informativo del presidente de la Generalitat de Cataluña, José Montilla, Chacón ha lamentado que "grupos de reventadores" faltaran al "respeto" a las Fuerzas Armadas, "a la bandera nacional e incluso a los caídos por España y sus familiares", que según ha asegurado estaban "muy molestos" con esta actitud.
Por ello, ha animado a "estos grupos de reventadores" a expresar su malestar con el Gobierno durante los otros 364 días del año e incluso, si quieren hacerlo el mismo día 12 de octubre, a que tengan "el valor" de convocar una manifestación. "Pero que no perturben una fiesta de todos", ha reclamado, antes de desvelar la intención del Gobierno de consensuar con todos los grupos parlamentarios un protocolo de actuación sobre la Fiesta Nacional y el desfile. La ministra también ha lamentado la actitud de Venezuela y su ausencia en la marcha, argumentando que su abanderado estaba enfermo. "Las Fuerzas Armadas estamos muy satisfechas de la respuesta de México, Argentina, Chile y Bolivia. El acto de Venezuela por sí sola se califica", ha censurado. Es seguro que el presidente Chávez replicará a la ministra Chacón y contestará a las críticas que ha merecido el gesto de retirarse del desfile, anunciado horas antes de su comienzo.
En cuanto a los abucheos que se produjeron antes, durante y después del desfile, han merecido muy distinta atención y valoración en la prensa escrita, si bien se aprecia un generalizado desprecio hacia los alborotadores, sobre todo, porque no distinguieron algunos momento del desfile, como el homenaje a los caídos por la patria. También se valora muy positivamente el gesto y la declaración del Rey don Juan Carlos y del Príncipe don Felipe de mostrar su desagrado con esos gestos de desaprobación hacia el jefe del Gobierno. El propio José Luis Rodríguez Zapatero, conforme cuenta La Gaceta, minimizó la pitada, al afirmar que "forma parte del guión". En el mismo diario se señala que el PP no quiso valorar la pitada, si bien las Juventudes Socialistas apuntan a las Nuevas Generaciones del PP. El ministerio de Defensa dice que los abucheos fueron convocados por Internet y mensajes en los teléfonos móviles. En El País se ha señalado que Rubalcaba criticó que la extrema derecha se apropiara de la fiesta de todos, y que Rajoy haya guardado silencio mientras Esperanza Aguirre justificaba a los alborotadores.
El Mundo señala que Defensa atribuye a grupos organizados los gritos que hubo por sexto año consecutivo, y observa que posiblemente la imagen de Zapatero no había estado nunca tan baja desde que llegó a la Moncloa: o lo describe "silbado en la calle, vigilado por los organismos internacionales, burlados por países amigos y cuestionado en sus propias filas por las horrorosas perspectivas electorales". Habla La Vanguardia de "vocerío de la extrema derecha", y cuenta que el "tea party" -extrema derecha norteamericana- se moviliza contra el presidente del Gobierno, y que la derecha dura "coagula en Madrid en la probeta de la TV digital": Lo que explica así: Apaciguada la Cope por el Vaticano, el grupo Intereconomía ha tomado el relevo. En ABC se habla de "abucheos organizados por la extrema derecha según el PSOE". En la Razón se rechaza "la adulteración del acto". "Ayer no era la ocasión oportuna para los pitos y el pataleo, porque con ello se degrada una celebración que es de todos y que está por encima de las disensiones políticas...