Lorenzo Bernaldo de Quirós.- Llegó la recesión

MADRID 3 Nov. (OTR/PRESS) -

Como he repetido en numerosos artículos, la economía española entró en recesión en el tercer trimestre de 2008. Así lo ha certificado el Banco de España, que además ha anunciado un "ciclo bajista pronunciado y duradero". Esta tesis también la comenté en varias ocasiones. 2009 se cerrará con un crecimiento negativo del PIB no inferior al 1 por 100, y la economía no se recuperará hasta finales de esta Legislatura. Esto no significa que estemos en recesión tres años más, sino que ese período se definirá por tasas de crecimiento muy bajas, desde luego, inferiores al 2 por 100. Esto supone también que el desempleo puede llegar a escalar hasta el 20 por 100 de la población activa. Los españoles menores de cincuenta años no han vivido una crisis como la que se avecina.

Ha terminado la fase expansiva más larga de la democracia. El consumo privado se ajusta a la baja para hacer frente a las deudas acumuladas durante los pasados años de esplendor, para protegerse frente al riesgo de desempleo. La inversión de las empresas se contrae porque existen menos posibilidades de obtener beneficios en un entorno depresivo, porque tienen que reducir su endeudamiento y porque se enfrentan a dificultades serias no ya para financiar nuevas inversiones sino para refinanciar las deudas contraídas en los años de bonanza. Así pues, esos dos elementos que dan cuenta de dos tercios del PIB van a comportarse fatal.

Ante este panorama, la reactivación de las bolsas experimentada la semana pasada tocará a su fin. Las "unicas buenas noticias" es que la inflación y el desequilibrio exterior se van a reducir pero no a causa de ninguna medida gubernamental, sino del hundimiento de la economía. La demanda interna se desploma y, en consecuencia, la presión sobre los precios cae y eso también lleva a necesitar menos capital exterior para financiar un consumo y una inversión internos en caída libre. Prepárense porque lo peor está por llegar. Vienen tiempos malos y durarán mucho.

Lorenzo Bernaldo de Quirós.