Actualizado 18/07/2010 14:00

José Cavero.- Montilla y Zapatero salvan el Estatut.

MADRID 18 Jul. (OTR/PRESS) -

Para todos los diarios es este sábado asunto principalísimo la resolución adoptada ayer por el Parlamento Catalán, después de una jornada intensa de debates sobre cómo responder, desde las instancias políticas catalanas, a la sentencia del TC. Ya había una respuesta ciudadana, la de la manifestación multitudinaria del pasado fin de semana. Ahora correspondía transformarla en resolución parlamentaria, y la tarea no resultó sencilla. Finalmente, más tarde e improvisadamente de lo previsto, la resolución conjunta de tripartito y CiU para mostrar su rechazo a la sentencia del TC sobre el Estatut, salía adelante con 115 votos a favor de CiU, PSC, ERC e ICV-EUiA y 18 en contra del PPC y Ciutadans. Una feliz mayoría para "el frente de progreso", y una situación de casi marginación para quienes vienen apoyando la sentencia de los intérpretes de la legalidad estricta y de la Constitución.

Finalmente, y tras varias discusiones y propuestas alternativas insatisfactorias, el texto de la resolución aprobado no es otro que el preámbulo del Estatut que aprobó el pueblo catalán en referendo y que se refiere a Cataluña con el término nación, algo que el TC dejó sin validez jurídica, pero que los políticos catalanes no dan, ni mucho menos, por perdido. Es mucho más que una aspiración, es una realidad ya integrada y asimilada en la vida política catalana, y así lo reclaman... Pues bien, tras un pleno extraordinario en el Parlament en la que todas las formaciones expusieron su posición al respecto, PSC, ERC, ICV-EUiA y CiU suscribieron el contenido, aunque la debilidad del acuerdo se había visualizado en el hecho de que sólo socialistas y ecosocialistas firmaban la resolución.

La propuesta fue presentada por el presidente de la Generalitat, José Montilla, en el pleno extraordinario celebrado para orquestar una respuesta a la sentencia del Alto Tribunal, que ahora será trasladada al Congreso. En su segunda intervención en el pleno monográfico, Montilla justificó que presentaba esta resolución porque "nada representa mejor el sentimiento del pueblo" catalán. El preámbulo establece que: "El Parlament de Cataluña, recogiendo el sentimiento y la voluntad de la ciudadanía de Cataluña, ha definido Cataluña como nación de manera ampliamente mayoritaria".

En la sentencia, el TC negó que Cataluña sea una nación en sentido jurídico porque la "única" que existe es la española. CiU y ERC han dejado claro que sus aspiraciones nacionales van más allá del texto que se presentará como resolución, pero respaldan la propuesta del presidente de la Generalitat. Así, cumpliendo con el compromiso adquirido y destacando que es el momento de que el Parlament esté a la altura de las circunstancias, Artur Mas ha dejado claro que el proyecto convergente va "mucho más allá" del preámbulo.

Mientras tanto, Joan Puigcercós, ha advertido que pese a "aprobar la resolución, no solucionaremos el problema, porque el problema trascenderá". A su vez, el Parlament rechazaba las resoluciones propuestas tanto por el PPC como por Ciutadans, en las que ambas formaciones coincidían en exigir el cumplimiento estricto de la sentencia del Tribunal Constitucional (TC) sobre el Estatut, así como que se revisen las leyes que quedan afectadas por esta sentencia. Las resoluciones de ambas formaciones han sido rechazadas con los votos en contra de los grupos parlamentarios del PSC, ICV, CiU, y ERC. El PPC pide no sólo que la Cámara catalana acate la decisión del alto tribunal sobre el Estatut, sino que se comprometa asimismo a "acatar en un futuro las sentencias que se pronuncien sobre los recursos pendientes de resolución". El grupo parlamentario popular exige también que la cámara catalana inste al Govern a adoptar las medidas necesarias para hacer efectiva la sentencia, así como que vele porque el resto de poderes públicos de Cataluña actúen conforme a lo dictado por el TC. Por su parte, Ciutadans ha precisado en su propuesta de resolución las leyes que, a su juicio, deberían revisarse al quedar afectadas por el contenido de la sentencia.

A esta noticia se añadía el pacto de Montilla y Zapatero para bajar la tensión producida por la sentencia sobre el Estatut, y el anuncio de la disposición del Gobierno de favorecer una futura reforma de la Constitución que dé vía libre a la consideración de Cataluña como nación. Varios diarios toman partido este sábado sobre la resolución y sobre la pelea y colaboración de Cataluña y España que se ha reflejado en las interpretaciones de la sentencia...

Dice ABC que el Gobierno se muestra dispuesto a cambiar la Constitución para salvar el Estatuto, y que el Ejecutivo anuncia su posición a incluir la nación catalana en el texto de la Carta Magna. También El País señala que el gobierno ve factible una futura reforma de la Constitución, y que Zapatero y Montilla pactan la vía para bajar la tensión del Estatuto. Distinta es la visión de El Mundo: Zapatero cede ante la presión y promete burlar la sentencia. La Razón destaca la resolución del Parlament: El Parlament reta al TC: Cataluña sí es una nación. Y que el Gobierno no cierra la puerta a incluir la Nación española en la carta magna.

La Gaceta también se muestra crítica: Zapatero se mofa del TC y reformará totalmente el Estatut. Público cuenta que Montilla pidió la reforma de la Constitución, y destaca La Vanguardia la "escueta unidad catalana contra el fallo del TC", y que la disposición de Artur Mas a votar cualquier iniciativa de Montilla desbloqueó el pacto. Cuenta también La Vanguardia que Zapatero atender, el martes, en la reunión que mantengan, las demandas de Montilla. Pero rechazará un coladero. El Gobierno sólo ve peligrar dios de las 55 leyes del Estatut, Sindic y referéndum.

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