Samsung quiere más sensores biométricos en más dispositivos móviles

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MADRID, 19 May. (Portaltic/EP) -

   Samsung está trabajando para usar sensores biométricos en su sistema de seguridad móvil, el cual la compañía espera expandir a los modelos de teléfonos inteligentes de gama baja, de acuerdo con las palabras de uno de sus ejecutivos que recoge The Wall Street Journal.

   "Estamos pensando en los distintos tipos de mecanismos biométricos, y uno de los puntos que más llama la atención es la detección del iris", dijo el vicepresidente senior de Samsung, Rhee In- jong, en un foro con analistas e inversores en Hong Kong.

   Rhee encabeza el desarrollo del software móvil empresarial de Samsung llamado Knox. La autenticación biométrica en los dispositivos móviles de hoy consiste principalmente en el uso de la huella digital de un usuario como un escáner.

   Samsung adoptó por primera vez el escaneo de huellas digitales en sus teléfonos inteligentes con el Galaxy S5 lanzado en abril, unos siete meses después de que lo hiciera el iPhone 5S de Apple.

   "Nosotros, como líderes del mercado, seguimos la tendencia del mercado", dijo Rhee, al mismo tiempo que señaló que los nuevos tipos de sensores, como los utilizados para la detección del iris humano, probablemente estarán disponibles para su adopción en los teléfonos de gama alta primero.

   Samsung ha estado luchando durante mucho tiempo para ganar clientes corporativos para sus dispositivos móviles, un reto que la compañía espera superar con su sistema Knox, para competir con rivales como Blackberry.

   Hay 87 millones de dispositivos que vienen integrados con Knox, dijo Rhee. Entre esos dispositivos, solo 1,8 millones utilizan activamente Knox, incluyendo las industrias reguladas, como bancos, la asistencia sanitaria y las sociedades financieras.

   Rhee espera que la demanda del sistema de Knox de Samsung se amplíe a otros actores de la industria. Se desconoce el número de clientes de pago que la compañía ha ganado hasta la fecha con su sistema de Knox.

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   - WSJ 

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