Mando Xbox 360
JUANPOL FLICR CC
Actualizado: viernes, 3 diciembre 2010 13:15

MADRID, 3 Dic. (Carlos Hergueta/Portaltic) -

La consola Xbox 360 ha cumplido esta semana cinco años desde su lanzamiento en España, el pasado 2 de diciembre de 2005. Un lustro de vida para la segunda consola de Microsoft, que entró de lleno en el sector de los videojuegos en 2001 y ha conseguido hacerse un hueco importante en un sector en el que otras muchas han caído. Repasamos los primeros pasos de la compañía en la industria, sus dos consolas, el nacimiento de los controles con movimiento y el último gran paso de Microsoft en los videojuegos: Kinect.

Se ha abierto una etapa importante para Microsoft. Ha surgido un nuevo y emocionante escenario en el que la compañía de Bill Gates lidera, al menos en cuanto a vanguardia tecnológica, la detección de movimiento. Una carrera que, sin embargo, inició otra: Nintendo. En este recién rediseñado escenario, sin embargo, Microsoft es la que tiene las mejores cartas: potencia gráfica, millones de usuarios online y la tecnología de detección de movimiento más ambiciosa.

Nintendo fue la pionera, Sony siguió sus pasos con Move y Microsoft llegó la última. Ocurre exactamente como se produjo la llegada de la compañía a este negocio, el de los videojuegos, hace diez años; algo hasta entonces impensable en un mercado de compañías con larga trayectoria dedicadas a los videojuegos. Un sector, además, en el que no surgen nuevos fabricantes de consolas todos los días. Una tarea en la que otros han caído. Veamos cómo comenzó la senda que ha llevado a Microsoft hasta Kinect.

MICROSOFT LLEGA A LOS VIDEOJUEGOS.

En 1998 llegó al mercado Sega Dreamcast, la que poco tiempo después se convertiría en la ultima consola de la compañía japonesa, que pasó a dedicarse al desarrollo de juegos para todas las plataformas tras las bajas ventas. Esta consola empleaba una adaptación de Windows CE y significó el nacimiento del verdadero interés de Microsoft por el mercado de los videojuegos fuera del PC.

El gigante de Redmond comenzó en secreto un proyecto para desarrollar su primera consola de videojuegos, destinada a competir con las apuestas de Nintendo y Sony. A pesar de los numerosos desmentidos iniciales, el propio Bill Gates dejó caer en diversas entrevistas que desarrollaban una consola hasta que la firma lo confirmó oficialmente en 1999. Dos años después, en noviembre 2001, veía la luz en Estados Unidos la primera videoconsola doméstica de la compañía de Windows.

Desarrollada en colaboración con Intel y Nvidia, Xbox fue la consola más potente de su generación. Además, fue la mejor preparada y apoyada en el terreno de juego online, de tal forma que se fue consolidando la plataforma Xbox Live.

De hecho, este millonario servicio online -veremos más adelante- podría jugar un papel fundamental en el éxito de Kinect. Enfrente de Xbox se situaban Playstation 2, heredera del éxito de su predecesora, y Gamecube, una potente máquina con unos juegos complicados de piratear gracias a su forma de miniDVD.

La irrupción de Microsoft en este mercado fue razonablemente satisfactoria. La consola logró vender casi 25 millones de unidades en todo el mundo, fidelizó a muchos usuarios experimentados que confiaban en su catálogo maduro y sólido juego online y, por último, logró adelantar en ventas de 'hardware' nada menos que a Nintendo. Se estima que la factoría de Mario distribuyó algo más 21 millones de consolas frente a los cuatro millones más de Xbox.

No todo fueron noticias positivas para el gigante de Redmond, por supuesto. La verdadera triunfadora de esta generación de consolas fue la Playstation 2 de Sony. La compañía japonesa, tras el buen arranque en la industria con Psx, volvió a salir al campo con una consola asequible, con una razonable potencia gráfica y reproductor de DVD integrado, algo nada habitual en aquella época (se lanzó en marzo de 2000) en este tipo de máquinas. Además, Sony se preocupó de asegurarse lanzamientos exclusivos de primer nivel para su máquina. Todos estos valores se tradujeron en la estremecedora cifra de 150 millones de Playstation 2 vendidas hasta la fecha.

A finales de 2004, la división Entertainment & Devices (Que fabrica la Xbox) obtuvo una pérdida de 154 millones de dólares a lo largo del trimestre. Sin embargo, Microsoft había creado una marca y un servicio online que no pensaba desaprovechar. Los cimientos habían sido construidos y en Microsoft estaban dispuestos a seguir buscando el liderazgo.

ALGO SE ESTABA MOVIENDO.

Pasaron los años y estas consolas empezaron a dar muestras de desgaste, por lo que las compañías comenzaron a trabajar en las sucesoras de Playstation 2, Xbox y Gamecube. Microsoft sabía que uno de los factores que afectó a las ventas de su primera consola fue el haber llegado al mercado más tarde que la reina del baile. De esta forma, Xbox 360 se lanzó alrededor de un año antes que Playstation 3 (2005 y 2006, respectivamente).

El mejorado servicio online de la nueva consola de Microsoft, el tiempo en el que fue en solitario la única máquina de buena generación y un catálogo de juegos muy potente consiguieron que Microsoft mejorara su posición.

En la presente generación de consolas, es Microsoft la que ostenta el segundo puesto de ranking de ventas de consolas, con más de 45 millones de unidades vendidas de Xbox 360, por delante de Playstation 3, con 41 millones (Según las estimaciones de VGChartz). El líder no es otro que Nintendo, histórica contendiente que recuperó la tradicional posición fuerte de la que tanto se alejó con Gamecube.

¿Cuál es el secreto de Nintendo? Secreto poco, en realidad. No hay persona en la faz de la tierra que no haya oído hablar de Wii, sea jugadora o no. Aproximadamente en 2003 y con una consola que no vendía (Gamecube), la cúpula de Nintendo se reunió para hacer frente a una dolorosa realidad: necesitaban un cambio de rumbo. Aires nuevos, una idea fresca, un golpe de efecto que lograra lo que "la gran N" que había conseguido en el pasado: innovar y vender.

Shigeru Miyamoto, quién sino el padre de Mario, tenía una idea. El también creador de Zelda imaginó una forma de controlar los videojuegos diferente: no únicamente con botones sino mediante movimientos corporales. La idea de Nintendo era ofrecer una nueva forma de control que trajera nuevas posibilidades en el desarrollo de los videojuegos y que quitara el miedo de los profanos a complicadas combinaciones de botones.

En un principio la compañía se planteó que su nuevo sistema de control fuera un accesorio para Gamecube, tal y como reveló una patente. Sin embargo, visto el escaso impacto de la consola cúbica, Nintendo se lo pensó dos veces y decidió convertir al mando en el protagonista de un lanzamiento completamente nuevo. De esta forma, en 2005 la compañía presentó la videoconsola Wii, que se controlaría con un mando atípico, con forma alargada y pensado para ser usado con una mano.

En lugar de en la pulsación de botones, el control de Wii radicaba en realizar movimientos en el aire que imitaban los que se querían realizar dentro del videojuego. Nintendo no quiso dar mucho margen de maniobra a sus rivales y la consola estaba en las tiendas de todo el mundo para navidades de 2006.

Fue un éxito: Wii era diferente, osada y, por qué no, deliciosamente extraña. Gracias al interés de los medios, al boca a boca del público y a una ambiciosa campaña de marketing, la consola era muy popular. Todo esto unido a un precio de lanzamiento de 250 euros (juego incluido) propició que Wii se convirtiera en la consola de sobremesa de mayor éxito de la presente generación con más de 75 millones de unidades vendidas.

El impacto de Wii no pasó desapercibido entre la competencia. A la vista de las enormes ventas desde el mismo día de lanzamiento, Sony y Microsoft empezaron a pensar qué papel podían jugar en el nuevo mercado que se estaba abriendo. Porque si había una cosa clara para todos es que algo se estaba moviendo en la industria.