MADRID 12 Dic. (EUROPA PRESS) -
La secretaria de Estado de Cambio Climático del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino (MARM) en funciones, Teresa Ribera, que ha encabezado la delegación española en la Conferencia de las Partes de la Convención Marco de Cambio Climático que este domingo ha finalizado en Durban (Sudáfrica) ha vuelto "satisfecha" porque se ha conseguido "reordenar" el tablero del juego de las negociaciones del clima.
Tras participar en el Consejo Consultivo de Política Medioambiental, Ribera ha manifestado que en Durban se ha conseguido avanzar en las "dos grandes cuestiones" que eran cómo hacer evolucionar el sistema multilateral y cómo incrementar los compromisos de reducción. "Se ha contestado a la primera y se han sentado las bases para contestar a la segunda", ha apuntado.
Además, para la secretaria de Estado en funciones, en la Cumbre de Sudáfrica se ha logrado que la Unión Europea vuelva a ejercer su liderazgo como "actor global" ya que se ha aliado con el conjunto de los países en desarrollo que ha definido como "la gran fuerza emergente del siglo XXI" y que, combinadas ambas voluntades se pone de manifiesto hasta qué punto el sistema multilateral debe evolucionar integrando la acción de todos.
En este sentido, ha explicado que se ha aceptado "la necesidad de pasar por una etapa de transición" porque las necesidades de unos países y otros son diferentes. En todo caso, ha añadido que "por interés propio" y del conjunto de la comunidad internacional es "importante" que todos digan en el seno de Naciones Unidas que asumen responsabilidades y que se exijan cuentas de estas.
"El éxito más importante de Durban es que el Protocolo de Kioto sigue vivo. Esto es una gran satisfacción comprobar la confianza, la convicción de que el acervo común del sistema multilateral sigue siendo la principal fuente de inspiración para el tratado internacional que vendrá después", ha apostillado.
Para Ribera, esta era una "condición indispensable" para poder incrementar la "ambición" colectiva en la reducción de emisiones y ahora que se sabe que "todos" van a responder, a su juicio, llega la hora de las reducciones "reales" porque "no caben más dilaciones" ni más retrasos, ya que este "sin duda, es el gran reto" de los próximos años.
Asimismo, ha recordado que con las reducciones de gases de efecto invernadero voluntarias comprometidas por algunos países, la temperatura global subiría más de 3,5 grados centígrados, cuando la comunidad internacional se comprometió en Cancún a que ésta no subiera más de 2 grados centígrados en 2050.