La tolerancia térmica de las especies es clave para determinar su distribución en el futuro por el cambio climático

La tolerancia térmica de las especies es clave para determinar su distribución e
JOURNAL OF ANIMAL ECOLOGY
Publicado: miércoles, 3 abril 2019 12:36

   MADRID, 3 Abr. (EUROPA PRESS) -

   La tolerancia térmica de las especies es clave para determinar su futura distribución ante el cambio climático ya que las poblaciones de una misma especie tienen diferencias de tolerancia de hasta 3 grados centígrados en diferentes regiones de la Península Ibérica, según una investigación en la que ha participado el Museo Nacional de Ciencias Naturales (MNCN-CSIC) y que ha sido portada de la revista Journal of Animal Ecology.

   Así, para prever la capacidad de resistencia de las especies ante el cambio climático conviene comprobar su tolerancia térmica, que en los reptiles modifica los periodos que estos animales dedican a determinadas actividades marcadas por las condiciones climáticas.

   En el estudio han participado investigadores del MNCN-CSIC y de otras instituciones científicas de Portugal, Bélgica y Australia, que han estudiado el fenómeno de la tolerancia térmica en 59 poblaciones de 15 especies de lagartos y lagartijas ibéricas.

   Así, el artículo revela también que de media estos reptiles pueden tolerar temperaturas corporales entre 41 y 48 grados centígrados según las especies.

   El investigador de la Universidad de Adelaida, que también ha trabajado en el MNCN, Salvador Herrando, ha subrayado que conocer el contraste entre poblaciones es "importante" porque "muchas" investigaciones utilizan la tolerancia térmica de una sola población para pronosticar la respuesta al clima en toda el área de distribución de la especie en cuestión.

   La investigación apunta que en función de la población elegida, la cantidad de tiempo estimada en la que la especie tiene su actividad restringida en su área de distribución puede variar 11 días en promedio, y más de 20 días para 6 de las especies estudiadas.

   Debido a que, durante los periodos de calor extremo, los reptiles no pueden alimentarse ni reproducirse, la variación de la tolerancia térmica entre poblaciones condiciona las estimaciones del impacto climático sobre las especies. Por eso debe ser tenida en cuenta en los estudios de cambio global.

   El investigador del MNCN David Vieites ha añadido que los datos sugieren que la respuesta fisiológica al calentamiento global de muchas especies "puede estar infravalorada", al menos en parte de su rango de distribución, y que gracias a ello, algunas poblaciones van a tolerar mejor que otras el incremento global de temperaturas.

   La Península Ibérica concentra una alta diversidad de reptiles así como complejidad orográfica y climática. En la actualidad hay unas 25 especies de lagartijas y lagartos diurnos en la región, es decir, los investigadores han trabajado con el 60 por ciento de las especies ibéricas de los llamados lacértidos.

   Para completar la investigación, los ecólogos radicados en el Museo Nacional de Ciencias Naturales recorrieron 25.000 km en España y Portugal, y muestrearon más de 300 reptiles; dedicaron 200 horas a experimentos fisiológicos y más de 500 horas al cuidado de los animales en la Estación Biológica de El Ventorrillo para su posterior devolución al hábitat nativo.

Leer más acerca de: