HUESCA, 30 Mar. (EUROPA PRESS) -
El juicio por el secuestro y asesinato de la empresaria María Pilar Blasco, de Sabiñánigo (Huesca), ha quedado visto para sentencia. En la última sesión del juicio, celebrada en la Audiencia Provincial de Huesca, han prestado declaración nueve médicos forenses que han explicado las causas de la muerte de María Pilar Blasco y los letrados han presentado sus conclusiones.
Después de cinco jornadas, y tras haber escuchado a más de 50 testigos y haberse presentado los informes de criminalística y forenses, las partes han conservado sus calificaciones iniciales.
La acusación, representada por el Ministerio Fiscal, y la acusación particular, ejercida por la familia de la víctima, mantienen su petición de 40 años de prisión tanto para el principal imputado, el empresario Francisco Javier Puyó, como para el ciudadano rumano, Gabriel Claudiu Trebea, al que consideran cómplice.
A ambos les imputan los delitos de robo con intimidación, secuestro y asesinato. Además, añaden una indemnización al empresario de 300.000 euros para la familia de María Pilar Blasco.
Por su parte, la defensa solicita la libre absolución de Francisco Javier Puyó y reclama que, en caso de condena, se aplique la atenuante por dilación indebida de juicio.
La letrada Carmen Sánchez ha considerado que "ha habido un retraso indebido de la Administración de Justicia agotando el plazo máximo de la prisión provisional". Sánchez también ha pedido la deducción por falso testimonio de la declaración de su testigo Esther Abarca, del bar Chinchetas de Sabiñánigo.
El principal imputado en este caso alegó, como coartada, haber comido en este establecimiento el día del crimen. En su testimonio ante el tribunal, la testigo se desdijo de lo declarado anteriormente asegurando no recordar algunas cuestiones como la hora en la que el empresario estuvo en su bar.
"NO HAY PRUEBAS CONCLUYENTES"
Por su parte, Manuel Arcas, abogado del imputado como presunto cómplice, el ciudadano rumano Gabriel Claudiu Trebea, mantiene que no hay pruebas concluyentes para inculpar a su cliente y por ello pide también la libre absolución.
Arcas ha insistido en que "de más de 50 testigos solo dos han nombrado a mi representado, uno para decir que compró un billete de avión y otro para decir que se encontraba en un locutorio la mañana de antes". El letrado ha observado que "se le están pidiendo 40 años de prisión y no hay pruebas concluyentes".
Por último, el abogado de la acusación particular, Enrique Trebolle, ha manifestado que la familia está desolada deseando que se haga justicia. "Están desolados y muy afectados confiando en la Justicia. El ser querido no lo pueden recuperar así que el único resorte que tienen es la confianza en que se haga justicia", ha remarcado.
Finaliza así en la Audiencia Provincial de Huesca el juicio por el secuestro y asesinato de María Pilar Blasco Gracia, una empresaria de 54 años de edad, vecina de Sabiñánigo (Huesca), cuyo cadáver fue encontrado el 14 de junio de 2008 sumergido en un canal próximo a su localidad, después de que la mujer desapareciera el 10 de junio de 2008, cuando iba a su trabajo, un negocio familiar de materiales de construcción.
