MURCIA, 1 Ago. (EUROPA PRESS) -
El obispo de la Diócesis de Cartagena, monseñor José Manuel Lorca Planes, tomó hoy posesión de su cargo en la Catedral de Murcia, en una celebración eucarística a la que asistieron autoridades eclesiásticas, militares y civiles y fieles.
Así, a la citada ceremonia acudieron, entre otras personalidades, sacerdotes procedentes de Murcia y de fuera de la Región; el presidente de la Conferencia Episcopal Española, Antonio María Rouco Varela; el prefecto de la Congregación para el Culto Divino y Los Sacramentos, Antonio Cañizares; el nuncio de Su Santidad Benedicto XVI en España, Manuel Monteiro de Castro; y el nuncio de Eslovania, Santos Abril Castelló.
Además de los arzobispos de Burgos, Francisco Gil Hellín; de Granada, Francisco Javier Martínez Fernández; el de Valencia, Carlos Osoro; y el de Zaragoza, Manuel Ureña; así como 23 obispos -16 titulares (entre los que se encontraba el obispo de Alcalá Henares, Juan Antonio Reig Pla, antecesor en el cargo de Lorca Planes), cinco auxiliares y dos eméritos (uno de ellos Javier Alzagra)- y cuatro vicarios generales.
En cuanto a autoridades civiles asistió el presidente de la Comunidad, Ramón Luis Valcárcel; el delegado del Gobierno, Rafael González Tovar; el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Murcia, Juan Martínez Moya; algún consejero del Gobierno regional; diputados; senadores y representantes de diversos ayuntamientos de la Región, entre ellos el alcalde de Murcia, Miguel Ángel Cámara, y la alcaldesa de Cartagena, Pilar Barreiro.
A lo largo de la ceremonia, se hizo lectura de la carta que su Santidad el Papa Benedicto XVI envió al nuevo obispo de la Diócesis de Cartagena, y posteriormente se le entregó el báculo y de la mitra, símbolos de la misión de "pastor" de la Iglesia murciana que ahora inicia el nuevo obispo de la Región.
Asimismo, una representación de toda la Diócesis --presbíteros, diáconos y seglares-- se acercaron a la Cátedra para manifestar la obediencia y afecto al nuevo pastor. A continuación, monseñor José Manuel Lorca Planes, como obispo de la Diócesis de Cartagena, presidió la celebración eucarística.
HOMILÍA
Lorca Planes, ya como obispo de la Diócesis de Cartagena, hizo referencia en su homilía al amor "como estilo de vida que nos debe caracterizar" y a Jesucristo como "centro de nuestra vida", como "punto de partida absolutamente necesario".
Por eso animó a los allí presentes a que digan a Jesús que "cuente con nosotros", lo que "exige dejar atrás el pasado: un cambio de mente y de vida", aunque reconoció que es un camino que conoce "las espinas de las pruebas y persecuciones".
Advirtió que el amor cristiano "es algo más que un mandamiento, es un don" y esta característica de pertenencia "nos ha sido dada, no es negociable, no la podemos cambiar".
Asimismo, los animó a que transmitan este mensaje "con fuerza" y les pidió que no caigan en la tentación de pensar que "no aportareis nada a los demás, que vuestra misión será inútil", ya que "sois portadores de un gran tesoro, aunque se lleve en vasijas de barro".
Insistió a sus fieles en que creyeran "en la acción y el coraje que da el Espíritu contra el desengaño, la desilusión, el conformismo, la calumnia, la falta de responsabilidad, la pasividad, el desaliento y la rutina".
Durante su homilía, Lorca Planes agradeció a su antecesor inmediato, monseñor Reig Pla, la iniciativa de ofrecer la capilla pública del Obispado "para la adoración perpetua del Santísimo", por el "bien que hace a todos los que acuden a Jesús buscando el consuelo y la paz".
De igual forma, le pidió al nuncio de Su Santidad Benedicto XVI en España, Manuel Monteiro de Castro, que le trasmita al Santo Padre "nuestra fidelidad, la mía y la de todos los cristianos de esta Diócesis, que conoce personalmente" y que le diga que "si tenemos la dicha de volver a verlo entre nosotros, no será recibido sólo como un visitante ilustre y especial, sino como nuestro padre queridísimo y vicario de Jesucristo".
