Acaip denuncia la agresión de un preso a un funcionario de la cárcel valenciana de Picassent

Actualizado: miércoles, 16 junio 2010 14:42

VALENCIA, 16 Jun. (EUROPA PRESS) -

El sindicato Acaip denunció hoy la agresión de un preso a un funcionario de Picassent (Valencia) al mediodía del pasado lunes cuando el recluso regresó a la prisión tras haber salido para asistir a un juicio.

Según indicó Acaip en un comunicado, una vez en la celda, el preso "comenzó a aporrear insistentemente de forma violenta la puerta de la misma", por lo que un funcionario de servicio se acercó. El interno "salió de forma agresiva al pasillo, profiriendo grandes gritos, solicitando que se le facilitase la metadona que habitualmente tomaba".

El sindicato informó que el funcionario trató de explicar al recluso que lo harían cuando fuera posible dado que a esas horas hay un número importante de trabajadores comiendo y era imposible en ese momento su traslado a la enfermería.

Entonces, según Acaip, el interno comenzó a dar muestras cada vez de una "mayor agresividad y violencia" y empezó a amenazar gravemente y proferir graves insultos contra el trabajador, al que lanzó una patada en el estómago al funcionario, que logró esquivarla parcialmente. Acto seguido, le lanzó un puñetazo a la cara, que el empleado público logró evitar, aunque le llegó a rozar. El funcionario reclamó ayuda de más compañeros y fue necesaria la intervención de varios de ellos para conseguir reducir al interno.

El trabajador, a consecuencia de esa agresión, sufría dolores en un brazo y zona abdominal, y contusiones tanto en el brazo como en la cara. El sindicato lamentó que, pese a la importancia de los hechos, "al interno simplemente se le trasladó de módulo, no aplicándosele ningún régimen de vida más restrictivo".

Para el sindicato, "es injustificable que hechos como éste queden sin ningún tipo de castigo, porque supone volver varios años atrás, cuando los internos se creían totalmente impunes, porque agredir a los trabajadores les salía gratis".

En esta línea, criticó que "no hay intención de solicitar la aplicación a este interno del régimen de vida más restrictivo (Primer Grado) que se aplica a los que han protagonizado incidentes graves durante su estancia en prisión" ni "tampoco parece que siquiera se vaya a solicitar su traslado a otro centro penitenciario, con lo que es más que probable que en pocas fechas el funcionario agredido vuelva a coincidir en el módulo con el interno agresor".

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