Actualizado 12/02/2010 14:45

Más de 300.000 niños son explotados como soldados en el mundo y entre ellos, unas 120.000 niñas "olvidadas"

Reuters

MADRID, 12 Feb. (EUROPA PRESS) -

Los organismos internacionales estiman que en al menos 86 países, más de 300.000 niños están siendo explotados como soldados por guerrillas y ejércitos y entre ellos, hay más de 120.000 niñas que sufren todo tipo de abusos sexuales y que a menudo son "olvidadas" en los procesos de desarme Desmovilización y Reintegración (DDR).

Cuando se conmemora el Día Internacional del Niño Soldado, las ONG que integran la Coalición Española contra la Utilización de Niños y Niñas Soldados vuelven a poner sobre la mesa que "donde existe un conflicto armado es casi segura la participación de menores".

En declaraciones a Europa Press, la coalición, integrada por Alboan, Amnistía Internacional, Entreculturas, Fundación el Compromiso, Save the Children y el Servicio Jesuita al Refugiado, que este año se ha centrado en los menores soldado de la guerrilla colombiana, recuerda que esta realidad se produce en al menos 86 países del mundo.

En este sentido, según los últimos datos difundidos por Naciones Unidas, el diez por ciento de los niños soldado se encuentran en República Democrática del Congo. No obstante, la Coalición señala también a Chad, Israel, Somalia, Sudán y Sur de Sudán, Uganda, Yemen y Myanmar, "el país que más recurre a ellos" y donde "miles de menores forman parte de las fuerzas armadas".

Así, aunque más de tres cuartas partes de los países del mundo han firmado, ratificado o se han adherido al Protocolo Facultativo de la Convención sobre los Derechos del Niño, relativo a la participación de menores en los conflictos, la Coalición denuncia que "muchos Estados han socavado el espíritu, si no la letra" de aquel acuerdo.

No en vano, el último informe de la Coalición, publicado en 2008, advirtió de que las iniciativas llevadas a cabo hasta la fecha "han sido insuficientes" porque "cuando estalla, se ranuda o se intensifica un conflicto, será casi inevitable que los menores se conviertan en soldados".

Por todo ello, exige que se intensifiquen los esfuerzos porque "anteponer los derechos de los niños a las necesidades militares exige cambios de gran alcance en los valores y las actitudes" ya que "mientras no se acepte que la infancia se extiende hasta los 18 años y que el espíritu del Protocolo espera de los Estados algo más que el hecho de modificar la edad de cumplimiento del sercicio militar, los menores continuarán en peligro de convertirse en soldados, especialmente en tiempos de crisis".