Actualizado 26/12/2013 12:33

Defensora del Pueblo pide el traslado de Manar y su familia

Son trece solicitantes de asilo, entre los que se encuentra una mujer inmovilizada por quemaduras severas fruto de un bombardeo

   MADRID, 26 Dic. (EUROPA PRESS) -

   La Defensora del Pueblo, Soledad Becerril, ha remitido un escrito a la Secretaría General de Inmigración y Emigración para que, en coordinación con la Dirección General de la Policía, traslade "de manera inmediata a la Península" a los 13 miembros de una familia siria entre los que hay heridos de gravedad, que se encuentran en Melilla tras haber sido admitida a trámite su petición de asilo a España.

   Según el escrito, al que ha tenido acceso Europa Press, desde la Alta Institución se sugiere "trasladar de manera inmediata a la Península, dentro del programa de acogida humanitaria coordinado conjuntamente por la Dirección General de Migraciones y la Dirección General de la Policía" a los componentes del citado grupo familiar "a fin de que las personas que padecen lesiones puedan recibir la atención médica especializada urgente que precisan".

   También la Junta de Andalucía se ha pronunciado sobre este caso. La Consejería de Igualdad, Salud y Políticas Sociales de la Junta de Andalucía ha puesto a disposición de esta familia la unidad de quemados del Hospital Virgen del Rocío, en Sevilla, que es referencia en este tipo de tratamientos, y ha puesto en conocimiento de la Delegación del Gobierno su disposición a articular mecanismos para que esta familia pueda ser trasladada hasta allí.

   La defensora y la Junta recogían así el testigo de las quejas presentadas por la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR), que el pasado mes de octubre tuvo conocimiento de que los trece miembros de una familia nacional de Siria había llegado a Melilla huyendo del conflicto y después de que una bomba hiciera explosión en su casa, conforme explica la representante de CEAR Sur, Lourdes Navarro.

CON PERMISO PARA RESIDIR EN ESPAÑA, EN TODA ESPAÑA

   Se encontraban "hacinados" en una vivienda con miedo incluso de salir a la calle, aunque entre ellos había varios heridos con necesidad de atención médica urgente. La más grave es una mujer de nombre Manar a quien la deflagración produjo quemaduras severas en todo el cuerpo que le impiden moverse y la mantienen postrada en una cama.

   CEAR les derivó al hospital y formalizó con ellos solicitudes de asilo. Todas fueron admitidas a trámite para su estudio, por lo que los miembros de esta familia obtuvieron un permiso de residencia en España. Aunque cuentan con la autorización oficial y aunque en el Hospital Comarcal de Melilla han certificado que no dispone de los medios para prestar la atención especializada que requiere Manar, ni la Delegación del Gobierno ni la Dirección General de Policía les permiten viajar a la Península.

   "No existe justificación ni amparo legal ninguno para esta política", denuncia Navarro, para explicar que decenas de solicitantes de asilo quedan "atrapados" en las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla porque el Gobierno les prohíbe trasladarse a la península alegando que en virtud del acuerdo europeo de libre circulación, tiene la obligación de restringir la circulación de personas también en sus fronteras internas.

   Este acuerdo, conforme destaca la representante de CEAR, es aplicable a personas y mercancías, pero "nunca" puede esgrimirse en los casos de solicitantes de asilo con la petición admitida a trámite, porque no son migrantes ni extranjeros sin más, sino ciudadanos que cuentan con una autorización legal para residir en España, en cualquier lugar de España, mientras las autoridades estudian su petición. De hecho, si en seis meses no han resuelto, el permiso que ostentan para estar en el país les permite también trabajar.

SIRIOS QUE PREFIEREN NO PEDIR ASILO

   Sobre este asunto se han pronunciado reiteradamente el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía, el Defensor del Pueblo y el Relator Especial sobre Derechos Humanos de Naciones Unidas, sin embargo, el Gobierno no ha alterado esta práctica que, según CEAR, está provocando que muchas personas merecedoras del estatuto de refugiado que viven actualmente en Ceuta y Melilla hayan declinado pedir la protección para tener alguna posibilidad de viajar a la Península.

   "Es muy significativo que de las 194 personas sirias que se encuentran en la ciudad de Melilla, solamente 12 hayan solicitado asilo. Este hecho responde a la restricción de movimientos a que se ven sometidos los y las solicitantes de asilo en las ciudades de Ceuta y Melilla, que viola el principio de libre circulación contemplado en la Constitución Española y la Ley de Asilo", explicaba CEAR con motivo del lanzamiento de su campaña 'Abre tus puertas a Siria'.

   En total, 2,3 millones de personas refugiadas han huido de Siria buscando refugio, fundamentalmente a los países vecinos de Turquía, Líbano, Jordania, Irak y Egipto. Sólo una ínfima parte, 24.110 personas en 2012, ha dirigido su petición a un país europeo. El año pasado, sólo 255 personas consiguieron llegar a España y pedir la protección, según CEAR, porque la política de fronteras de la UE está "abocando a las personas refugiadas a seguir rutas cada vez más peligrosas y entregándoles a los traficantes de personas".