Actualizado 15/11/2012 14:33

La Defensora del Pueblo alerta del "grado de sofisticación" y el respaldo económico que tienen las redes de trata

Soledad Becerril
EUROPA PRESS


MADRID, 15 Nov. (EUROPA PRESS) -

La Defensora del Pueblo, Soledad Becerril, ha alertado este jueves de que las redes de trata de personas tienen un "grado de sofisticación enorme", ya que operan con "finezza" y tienen respaldo económico, en el marco de la jornada 'Víctimas de trata con fines de explotación en España: La legalidad en el cuarto oscuro' de la Fundación Abogacía Española.

Durante su intervención, Becerril ha expuesto las principales conclusiones del informe 'La trata de seres humanos en España: Víctimas Invisibles' de la institución que encabeza, hecho público en septiembre. Así, ha señalado que este fenómeno tiene "dimensión transnacional", lo que, a su juicio, dificulta la cuantificación del número de víctimas y de los orígenes de estas y pone de manifiesto la necesidad de cooperación policial y europea.

Además, ha incidido en que también existe una "dificultad" para diagnosticar a las víctimas, que "pueden estar muy cerca en muchos momentos y uno no se da cuenta", y para distinguirlas de otras personas que solo están en situación irregular. En esta línea, ha destacado que muchas de ellas "no quieren contar sus circunstancias" porque "tienen miedo" por sí mismas y por las posibles represalias contra sus familias en origen, así como por "la propia condición humana". "A todos nos cuesta mucho revelar nuestras circunstancias personales cuando no son óptimas", ha añadido.

En este contexto, se suman, según ha subrayado Becerril, la falta de conocimiento de este lenguaje, que no del idioma, de los traductores; la falta de formación de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, a pesar de su "buena intención"; y la falta de conocimiento de la materia de los abogados que intervienen en estos procedimientos.

REFORMAS LEGISLATIVAS Y RECOMENDACIONES

Por todo ello, el informe plantea una serie de reformas legales y recomendaciones. Entre ellas se encuentran, según ha explicado, la petición de aumentar el periodo de reflexión que tienen las víctimas para decidir si colaboran con la Policía, que actualmente es de 30 días; así como la recomendación al Ministerio del Interior de formar a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad. En este punto, ha abogado por favorecer la intervención de mujeres "no por cuestiones de feminismo", sino porque estas imponen "un poquito menos" a las víctimas que los hombres.

En relación con la situación concreta de la trata en España, Becerril ha indicado que las víctimas proceden "fundamentalmente" de algunos países de Europa del este, del África subsahariana y de algunos países iberoamericanos, mientras que los explotadores son originarios también de estos lugares pero operan en territorio español. También ha recordado que en 2011 se diagnosticaron 14.400 posibles víctimas de trata, entre las que 1.082 fueron consideradas víctimas y se concedieron 58 autorizaciones de residencia.

Por su parte, el presidente del Consejo General de la Abogacía y su fundación, Carlos Carnicer, ha incidido en que "la esclavitud no solo no ha desaparecido, sino que ofrece hoy contornos sinuosos, absolutamente equívocos y que conllevan la impunidad de muchísimos delincuentes".

A su parecer, la esclavitud se refiere también a la falta de libertad y, sobre todo, a "las personas menos favorecidas, a aquellas que son maltratadas y forzadas a realizar lo que no desean realizar". En este sentido, ha remitido una circular a los decanos de España para que extremen las medidas disponibles a través de los servicios jurídicos sociales para detectar estos casos.