Izquierda abertzale niega que la promocione y dice que es un salto cualitativo en la estrategia de ilegalización

Actualizado: jueves, 14 mayo 2009 19:10

Se solidariza con los integrantes de II-SP y Alfonso Sastre "ante lo que constituye una auténtica caza de brujas ideológica y personal"

BILBAO, 14 May. (EUROPA PRESS) -

La izquierda abertzale negó hoy "la supuesta promoción e instrumentalización" por su parte de la candidatura Iniciativa Internacionalista-La Solidaridad entre los Pueblos (II-SP) y consideró que su impugnación es "un salto cualitativo en la estrategia de persecución e ilegalización de ideas que el Estado español ha venido desarrollando hasta el momento contra la izquierda abertzale".

En un comunicado, la izquierda abertzale se refirió, de esta forma a la impugnación por parte del abogado general del Estado, Joaquín de Fuentes Bardají, ante la Sala del 61 del tribunal Supremo de la lista presentada para las elecciones europeas por Iniciativa Internacionalista-La Solidaridad entre los Pueblo (II-SP), encabezada por el dramaturgo Alfonso Sastre, al considerar que se trata de una "sucesora fraudulenta" de la ilegalizada Basatuna.

En primer lugar, trasladó su solidaridad a las "gentes" que componen la candidatura Iniciativa Internacionalista-La Solidaridad entre los Pueblos y, en especial, a Alfonso Sastre "ante lo que constituye una auténtica caza de brujas ideológica y personal".

Por otro lado, denunció "este nuevo episodio de persecución política e ideológica por parte del Estado español" que, a su juicio, constituye "un salto cualitativo en la estrategia de persecución e ilegalización de ideas que el Estado español ha venido desarrollando hasta el momento contra la izquierda abertzale, por cuanto en esta ocasión se produce contra una candidatura electoral de ámbito estatal y completamente ajena a la izquierda abertzale".

En ese sentido, censuró que el Estado español utiliza la Ley de Partidos "como un chicle en beneficio de su estrategia de guerra no ya contra la izquierda abertzale sino, a la luz del mencionado salto cualitativo, contra toda forma de disidencia política en el conjunto del Estado".

"En una semana en la que destacados portavoces del PSOE han coincidido en señalar que la constitución del antidemocrático e ilegítimo gobierno de la Comunidad Autónoam Vasca certifica el cierre de la pretendida transición democrática, este nuevo ataque a las libertades democráticas vuelve a poner de manifiesto el carácter profundamente antidemocrático del Estado español y por ende, la falacia de la mal llamada transición democrática", criticó.

La izquierda abertzale afirmó que "30 años después de lo que en realidad no fue más que una operación de maquillaje del régimen de Franco, ni en el Estado español ni en Euskal Herria hay democracia y hoy, como entonces, el Estado español sigue empleando leyes de excepción para negar los derechos democráticos de los Pueblos, aniquilar toda forma de disidencia política e imponer su proyecto de 'España, una, grande, libre'".

Por otra parte, denunció "la campaña de intoxicación y manipulación mediático-policial desatada en contra tanto de la candidatura Iniciativa Internacionalista-La Solidaridad entre los Pueblos como de la izquierda abertzale".

La izquierda abertzale ya manifestó en su día que su opción de cara a las próximas elecciones europeas era la de conformar una candidatura nacional que, bajo la denominación "Euskal Herriaren Alde", abarcara al conjunto de Euskal Herria y respondiera a la necesidad de acumular fuerzas soberanistas-independentistas en pos de la consecución de un escenario democrático y la construcción de un Estado vasco desde la izquierda.

Esta opción, según lamentó, "sólo ha podido ser materializada legalmente en Ipar Euskal Herria, debido a que el resto de fuerzas políticas llamadas a participar en dicho proyecto han vuelto a anteponer sus intereses partidistas a los intereses del país".

Por último, la izquierda abertzale hizo un llamamiento al resto de fuerzas políticas a denunciar públicamente "esta nueva agresión antidemocrática" y a exigir la derogación inmediata de la ley de partidos.