Arabia Saudí renuncia a su asiento en el Consejo de Seguridad de la ONU

RIAD, 18 Oct. (Reutres/EP) -

El Gobierno de Arabia Saudí ha renunciado este viernes al asiento que le correspondía como miembro no permanente en el Consejo de Seguridad de la ONU a causa de "la incapacidad" de este organismo para "asumir sus funciones y responsabilidades en bien de la paz y la seguridad en el mundo".

"El Reino de Arabia Saudí considera que tanto los métodos y mecanismos de trabajo como el doble rasero del Consejo de Seguridad le impiden ejercer adecuadamente sus funciones y asumir sus responsabilidades en defensa de la seguridad y la paz en el mundo", ha declarado el Ministerio de Asuntos Exteriores en un comunicado, citado por la agencia estatal de noticias SPA.

Asimismo, Riad ha lamentado que "todos los esfuerzos internacionales de los últimos años, incluidos los de Arabia Saudí, no han dado lugar a las profundas reformas necesarias para recuperar la capacidad del Consejo de Seguridad en favor de la paz y la seguridad".

El reino saudí ha citado como ejemplos el conflicto entre palestinos e israelíes --que "persiste desde hace 65 años sin una solución justa y duradera" y que ha dado lugar a "varias guerras que han amenazado la paz y la seguridad internacionales"--, la inoperancia para eliminar "todas las armas de destrucción masiva" en la región de Oriente Próximo o la "incapacidad del Consejo de Seguridad para asumir sus funciones y responsabilidades en Siria", cuyo régimen "mata a su población y utiliza armas químicas ante los ojos y oídos de todo el mundo y sin enfrentarse a ninguna sanción".

En el comunicado, Arabia Saudí ha expresado su "sincero y profundo agradecimiento" por la "confianza" que le habían mostrado "todos los países" que la designaron miembro no permanente del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas para los próximos dos años, y se ha mostrado "orgullosa" de su "pleno y permanente compromiso con los propósitos y principios de la Carta de Naciones Unidas".

NUEVOS MIEMBROS

Arabia Saudí había sido elegida ayer jueves, por primera vez en su historia, miembro no permanente del Consejo de Seguridad de la ONU junto con Lituania, Nigeria, Chad y Chile, en sustitución de Azerbaiyán, Guatemala, Marruecos, Pakistán y Togo.

La designación de Arabia Saudí, Nigeria y Chad --decidida tras una votación secreta de los Quince-- ha sido duramente criticada a causa del historial negativo de estos tres países en materia de Derechos Humanos. Los países aspirantes a entrar en el organismo suelen presentar sus candidaturas con hasta diez años de antelación.

Ésta es la segunda ocasión en lo que va de mes que Arabia Saudí --un tradicional aliado de Estados Unidos en la región-- expresa públicamente su descontento por la escasa implicación del Consejo de Seguridad de la ONU en la crisis de Siria.

A principios de este mes de octubre, el ministro saudí de Asuntos Exteriores, Saud al Faysal bin Abd al Aziz Al Saud, canceló un discurso ante la Asamblea General de la ONU en protesta por la inacción internacional en la guerra de Siria y en el contencioso palestino, según informaron fuentes diplomáticas.

Riad se ha mostrado claramente a favor de los grupos insurgentes en la guerra civil siria y dos de las potencias con derecho de veto en el Consejo, Rusia y China, han bloqueado hasta la fecha todas las resoluciones de condena al régimen de Bashar al Assad.