VArios niños afganos juegan en un campo de desplazados en Afganistán.
PARWIZ PARWIZ / REUTERS
Actualizado: jueves, 23 marzo 2017 20:59

MADRID, 23 Mar. (EUROPA PRESS) -

El aumento de la violencia en Afganistán podría provocar que más de 1.100 niños afganos abandonen la escuela a diario en 2017, según ha denunciado la ONG Save the Children, que ha alertado de que la creciente crisis humanitaria en el país pone a los menores en peligro de ser explotados.

La organización, que ha indicado que más de 400.000 menores al año dejarán de asistir al colegio debido a la continua inestabilidad a la que se enfrenta la población en el país, ha advertido de que al menos un millón de afganos podrían verse obligados este año a abandonar Pakistán y regresar a sus lugares de origen.

La crisis ha empeorado desde que las autoridades paquistaníes reforzaron la regulación migratoria, lo que obligó a 610.000 afganos a abandonar Pakistán en 2016, una cifra que podría llegar a un millón de personas este año. Save the Children ha alertado de que esta situación tendrá consecuencias significativas sobre los servicios de educación y sanidad del país.

Más de la mitad de los niños que regresan a Afganistán desde Pakistán se encuentran sin escolarizar. Según la ONG, en la mayoría de los casos estos menores se ven obligados a trabajar para sostener a sus familias.

Save the Children ha advertido de que al menos un tercio de todos los niños afganos carecen de acceso a la educación, lo que los sitúa en una posición vulnerable y los pone en peligro de ser reclutados o de verse forzados a trabajar o a contraer matrimonio.

"Hoy comienzan las clases en Afganistán después de un duro invierno. Debería ser un día feliz, pero es un día trágico para millones de niños que no pueden acceder a la educación y se enfrentan a serias dificultades para poder sobrevivir", ha aseverado la directora de Save the Children en Afganistán, Ana Locsin.

"Sabemos que los menores que no van a la escuela se casan o comienzan a trabajar, y que en muchas ocasiones son reclutados por grupos armados o acaban siendo víctimas del tráfico de personas. Cuanto más tiempo pasan fuera del sistema educativo, más difícil es para ellos volver atrás", ha señalado Locsin.

TRABAJO INFANTIL

Jawid, un niño de 14 años que regresó de Pakistán con su familia en 2016, recoge basura para su posterior venta. "Cuando recojo basura me siento triste y me pregunto por qué tengo que trabajar a esta edad, cuando debería estar en el colegio. Es mi momento para recibir educación, no para trabajar", ha manifestado Jawid, que nació en Pakistán.

El aumento de la violencia durante 2016 se saldó con 923 menores muertos. La ONU, que estima que cerca de 450.000 afganos se verán obligados a desplazarse en 2017 debido a la violencia, ha señalado que al menos 9,3 millones de personas necesitarán asistencia humanitaria para poder sobrevivir.

"La población afgana se encuentra en una situación precaria ahora mismo. Las necesidades han aumentado y cada vez se producen más ataques por parte de grupos armados. Más gente huye de sus casas ante la falta de apoyo por parte de la comunidad internacional", ha aseverado Locsin.

"Hemos hecho un llamamiento a nivel internacional para que aumenten los fondos y la ayuda en educación en un intento por impedir que los avances que se han producido durante los últimos quince años, especialmente en relación con la escolaridad de las niñas, no se venga abajo por completo", ha afirmado.

Más noticias

Leer más acerca de: