ROMA, 17 Dic. (Reuters/EP) -
El presidente de Italia, Giorgio Napolitano, ha advertido de que el país podría verse arrastrado a un levantamiento social violento a menos que el Gobierno introduzca rápidamente medidas para aliviar la situación de la población, tras una semana de protestas en el país transalpino.
En un discurso pronunciado desde el palacio presidencial, en Roma, ha indicado que los ciudadanos "podrían verse involucrados en protestas accidentales o incluso violentas en respuesta a su oposición a las instituciones y a sus políticas".
"La recesión sigue golpeando (...) y necesitamos medidas fuertes más allá de las aprobadas por el Gobierno y el Parlamento para este año", ha agregado, sin dar más detalles al respecto o desarrollar qué tipo de medidas serían necesarias.
"La crisis que afecta a la eurozona ha dañado la cohesión social. Las previsiones más detalladas para 2014 indican que existe el riesgo de tensiones sociales generalizadas: un riesgo que hemos de tener en cuenta y al que se ha de hacer frente", ha argumentado Napolitano.
Pese a que el papel del presidente en Italia es considerado como principalmente ceremonial, Napolitano ha tenido que intervenir en varias ocasiones en el último año para mediar entre los partidos políticos y alcanzar acuerdos sobre las reformas a introducir en medio de la crisis económica que sacude al país.
Miles de italianos se han manifestado en las principales ciudades del país en protesta contra los recortes en los servicios públicos, el aumento de la tasa de desempleo --que se sitúa por encima del doce por ciento, y por encima del 40 por ciento para los menores de 25 años--, los escándalos de corrupción y la disminución de los salarios.
Este mismo lunes, la oficina de estadísticas del país, el Istat, ha indicado que un tercio de la población vive en riesgo de pobreza o de exclusión social. Así, ha determinado que el 29,9 por ciento de la población está en riesgo de pobreza, de carestía material o desempleada. La media europea es del 24,8 por ciento.
