BUCAREST, 8 Jul. (Reuters/EP) -
El primer ministro rumano, Victor Ponta, ha regresado este miércoles a Bucarest después de pasar un mes fuera del país a causa de la operación de rodilla a la que se sometió en Turquía y que ha desatado una crisis política en la nación europea.
Ponta viajó a un hospital turco a mediados de junio para someterse a dicha intervención quirúrgica sin informar previamente al presidente rumano, Klaus Iohannis, --algo inusual-- y en medio de la investigación en su contra por sus actividades como abogado.
A lo largo de estas semanas el silencio sobre el estado de salud de Ponta y sobre su continuidad en el cargo ha sido una constante en el Gobierno, lo que ha llevado a la oposición a cuestionar la estabilidad del Ejecutivo tripartito.
Ponta ha puesto fin a los rumores reapareciendo en público por primera vez en un mes. La televisión pública ha mostrado imágenes del socialdemócrata de 42 años entrando a la sede del Gobierno en muletas. Si bien no ha hecho ninguna declaración a la prensa, en Facebook ha contado que ha informado a Iohannis de que retomará sus funciones este jueves.
Gabriel Oprea, el líder del socio minoritario de Gobierno UNPR, se ha hecho cargo del Ejecutivo durante la ausencia de Ponta y la semana pasada tuvo que lidiar con la oposición en el Parlamento por la designación del jefe de Inteligencia.
El favorito era el candidato de Iohannis, que derrotó a Ponta en las últimas elecciones presidenciales, por lo que los socialdemócratas boicotearon la votación, que ha evidenciado el riesgo de que la cooperación entre la oposición parlamentaria pueda tumbar a la coalición de Gobierno.
