MADRID, 15 Nov. (EUROPA PRESS) -
Miles de personas, unas 5.000 según la organización, se concentraron este domingo alrededor de una hora en la madrileña Puerta del Sol para exigir al alcalde de la capital, Alberto Ruiz-Gallardón, que retire la tasa de basuras ya que la consideran "injusta y abusiva".
La concentración comenzó con una batucada a cargo de un grupo de jóvenes. Mientras tanto, los asistentes gritaron consignas como 'No a la tasa, Gallardón vete a tu casa' o 'Gallardón dimisión' al tiempo que lanzaban bolsas de basuras llenas de papeles de un lado a otro de la plaza a modo de pelotas hinchables.
El sentimiento en la Puerta del Sol era unánime, y es que para todos los asistentes, la tasa es algo "injusto" y una "vergüenza". Una vecina, Purificación, explicó a Europa Press que había acudido hasta el centro de Madrid para "protestar por la tasa de basura", ya que "es un engaño porque estaba en el IBI y ahora se tiene que pagar dos veces". Además, aseguró que ya le ha llegado el recibo, de 44 euros, pero que no lo va a pagar "hasta el último día".
Por su parte, Soledad explicó que ella es viuda, y que recibe una pensión de 400 euros. "De los 400 euros tengo que pagar 271 del IBI, más 59 de la basura... me quedo sin comer". "Por eso tienen que quitarla, porque es una vergüenza", explicó. En la misma línea se mostró María Eugenia, quien contó a Europa Press que su marido, con un 75 por ciento de minusvalía, recibe una pensión de 546 euros, de los que tienen que pagar 501 cada mes. "Ahora con el IBI, la tasa de basura, ¿con qué como yo?", se preguntó.
Sobre las 12.30 horas, el responsable de Medio Ambiente de la Federación Regional de Asociaciones de Vecinos de la Comunidad de Madrid (FRAMV), Paco Caño, leyó un comunicado en nombre de las asociaciones convocantes en el que recordó que la tasa "no es ecológica ni justa ni oportuna" sino que se trata de una "medida meramente recaudatoria".
"No estamos en contra de tasas e impuestos, sabemos que son imprescindibles para el mantenimiento de los servicios públicos y constituyen un mecanismo de redistribución de la riqueza, pero con esta medida recaudatoria la cuantía a pagar se establece en relación al valor catastral de las viviendas, lo que no es un indicador fiable del nivel de renta", aseguró.
En este sentido, aseveró que esta tasa sólo responde a "una política de despilfarro que arroja lo que es de todos al pozo sin fondo de proyectos megalómanos concebidos para el autobombo y la propaganda". "En resumidas cuentas, la crisis les ha descuadrado las cuentas, y en lugar de buscar remedio entre los enormes beneficios de quienes se comieron las vacas gordas cuando las hubo, rebuscan en la basura de los vecinos de Madrid", añadió.
Entre los asistentes se encontraban varios representantes políticos como la portavoz socialista en la Asamblea de Madrid, Maru Menéndez; el portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de la capital, David Lucas; y el portavoz de IU en el Consistorio, Ángel Pérez, entre otros.
Lucas aseguró que el alcalde "sólo pretende promocionar su imagen pública y política" y "no piensa para nada en los ciudadanos". "Gallardón tiene que escuchar el clamor popular, porque los ciudadanos no quieren que se les engañe, y no quieren sentir que su dinero sirve para seguir pagando su despilfarro sino para prestar más y mejores servicios", apostilló.
Asimismo, reconoció el "éxito de la campaña", y recordó que ya hay 115.000 firmas de vecinos, 300.000 quejas en el Consistorio, y "ya no cabe los recursos en las dependencias municipales". Además, se congratuló porque hace unos días "el Ayuntamiento anunció que se iban a ampliar los plazos de bonificación a todas las familias", el sábado "se anunció que se ampliarían las bonificaciones a parados, pensionistas y personas con rentas bajas", y este domingo "se anuncia que se va a ampliar también a los que disfrutan de la ayuda a domicilio".
"Esto demuestra que la presión y la movilización da sus frutos, porque el alcalde sabe que está obrando mal y va en contra los intereses ciudadanos, por eso les invito a que sigan movilizándose, recogiendo firmas, porque entre todos alcanzaremos el objetivo final: que retire las tasas y devuelva las cantidades indebidamente cobradas", concluyó.
Por su parte, Ángel Pérez explicó que su posición tiene que ver con "el tiempo, la forma y el contenido". "Por el tiempo, porque con la crisis económica esto es un síntoma más de que la crisis la pagan los trabajadores; de forma, porque no creemos que sean los metros cuadrados los que generan residuos sino las personas, y de contenido porque esta es una iniciativa que se deriva del área de Hacienda y no de Medio Ambiente, no es una tasa con carácter finalista, sino que tiene un afán recaudatorio".
"Esta crisis, una vez más, la pagan los trabajadores, los salarios, los pensionistas, las personas que sencillamente no tienen recursos exactamente igual que los que tienen muchos recursos. Estamos ante lo de siempre", añadió.
Por su parte, el presidente de la Federación Regional de Asociaciones de Vecinos de la Comunidad de Madrid (FRAMV), Ignacio Murgui, aseveró que la tasa "es injusta" ya que "no carga a quien más dinero posee ni a quien más basura emite".
Además, insistió en que la nueva carga impositiva es "inoportuna" debido a la dificultad económica que atraviesan miles de personas en Madrid y reprochó que no tenga un carácter finalista, ya que no irá dirigido a "mejorar el servicio" sino a hacer frente "a la crisis de ingresos del Ayuntamiento".
