El viernes comienza la Navidad madrileña con el encendido de la iluminación y un espectáculo pirotécnico

Actualizado: domingo, 22 noviembre 2009 13:35

Repiten la Ciudad de los Niños, el itinerario de belenes, la programación musical y teatral, y la Cabalgata de Reyes

MADRID, 22 Nov. (EUROPA PRESS) -

El próximo viernes comenzará la Navidad madrileña con el encendido, por parte del alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, de la iluminación decorativa, así como con un espectáculo de pirotecnia y música en la plaza de Oriente a cargo de la compañía The world famous.

Durante un mes largo árboles, mercadillos, belenes y luces, entre otros elementos, serán los protagonistas de una programación dedicada especialmente a los más pequeños y que "cambiará la ciudad", según aseguran desde el Ayuntamiento.

Así, habrá una nueva edición de 'La ciudad de los niños', que este año dispondrá de una mayor superficie; habrá programación musical y de artes escénicas concebida específicamente para estas fiestas; se podrá realizar un itinerario de belenes, y, por supuesto, se celebrará la tradicional Cabalgata que recibirá a los Reyes Magos el 5 de enero.

Además, la plaza del Callao albergará por primera vez, una pista de patinaje de unos 140 metros cuadrados que y estará abierta para el disfrute de todos los madrileños durante los días de las fiestas. Este remozado espacio también contará con un abeto de 20 metros de altura coronado por una estrella de cristal de un metro elaborada por la Real Fábrica de Cristales de La Granja. El Corte Inglés, que organiza esta iniciativa en colaboración con el Ayuntamiento de Madrid, hará réplicas de la estrella.

Además, un portavoz de la empresa explicó a Europa Press que "la campaña de Navidad de este año será muy importante y muy especial" y, aunque no quiso desvelar los detalles de la programación a la espera de la presentación oficial, que se celebrará mañana lunes a las 12.30 horas en el Palacio de Cibeles, sí indicó que "habrá propuestas muy especiales y novedosas, con muchas iniciativas en todos los centros de Madrid".

Por ejemplo, las tiendas de Preciados conservarán el tradicional Cortylandia, mientras que en la avenida de Felipe II, delante de El Corte Inglés de Goya, se colocarán, entre el 27 de noviembre y el 15 de enero, casitas alpinas, cuentos infantiles, un tren infantil y un tiovivo, entre otras cosas.

MERCADO DE NAVIDAD

Por su parte, la plaza Mayor también albergará, un año más, el tradicional mercado navideño, con 82 puestos de venta de belenes, adornos, árboles de Navidad y dulces típicos de las fechas. Los puestos de artículos de broma y disfraces repetirán, como en la pasada edición, en la cercana plaza de la Santa Cruz.

A este respecto, el presidente de la Asociación de Vecinos, Industriales y Comerciantes de la Plaza Mayor (APLAMA), Francisco Corazón, indicó a Europa Press que esta solución "funcionó muy bien el año pasado porque había más espacio para los puestos" y subrayó que el de la plaza Mayor es "un mercado infantil, como su propio nombre indica, y no hay que mezclar churras con merinas".

Así, el mercado tendrá "la misma estructura aunque con alguna novedad" que prepara el Ayuntamiento, y aseguró que será "muy bonito".

"Estamos muy satisfechos, este año se incorporan cosas que son del agrado de todos, pero es una sorpresa y deben contarlo los responsables municipales, que son los que han ideado el mercado", explicó. Será a finales de noviembre cuando el alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, inaugure el mercado junto con la iluminación navideña.

CIUDAD DECORADA

El encendido de las luces de Navidad es uno de los eventos más esperados en la previa de las fiestas, y su preparación comenzó a mediados del mes de octubre, con el objetivo de llegar a tiempo dentro de unos días.

Así, aunque desde el Ejecutivo local no se quieren desvelar los detalles, sí indicaron que habrá una decena de árboles de Navidad repartidos por la ciudad, algunos de ellos de nueva factura como el de Callao o el de la Red de San Luis, dedicado a la conmemoración del centenario de la construcción de la Gran Vía, que se celebra el próximo año.

Este abeto estará inspirado en los rascacielos típicos de principios de siglo XX y evocará la fascinación por ellos y por su apariencia nocturna. Hará juego con el alumbrado conmemorativo diseñado por el arquitecto Ben Busche para la zona, y que se basa en un 'skyline' imaginario con bombillas LED de varios colores.

El resto de árboles están ubicados, como el año pasado, a lo largo de los paseos de la Castellana, Recoletos y Prado. En concreto, ocho de estos montajes, que tenían una altura de 16,8 metros, estaban en Nuevos Ministerios, plaza de Colón, plaza de San Juan de la Cruz, paseo del Prado, plaza de Picasso y plaza de Castilla.

También había un árbol similar en la Puerta del Sol, diseñado por Devota&Lomba mediante trozos asimétricos de forma triangular. El abeto restante fue creado por Ágatha Ruiz de la Prada en 2008 y sus 51 metros de altura estaban instalados en la plaza de Carlos V durante las últimas fiestas.

Además, la iluminación seguirá de nuevo un criterio ecológico, apostando por el "menor consumo y contaminación", según adelantó la delegada de Medio Ambiente, Ana Botella, añadiendo que el objetivo es "optimizar la eficiencia de las instalaciones, proteger el medio ambiente urbano y poner en valor la ciudad" en unas fechas muy favorables para el comercio por el posible efecto llamada entre los consumidores, algo especialmente importante en el actual contexto de crisis.

El pasado mes de septiembre, Gallardón anunció que en toda la Gran Vía habrá un alumbrado conmemorativo inspirado en el cine y a cargo del diseñador Óscar Mariné. En el resto del centro, la mayoría de las luces son las mismas del año que viene, creadas por diseñadores de prestigio como Ángel Schlesser.

En las Navidades de 2008-09, Madrid contó con 160 espacios iluminados con 9 millones de bombillas que seguían esquemas de grandes diseñadores nacionales, muchos de los cuales se repetirán este año. El pasado ejercicio se destinaron 4,6 millones de euros a este objetivo, y el horario de encendido de las luces era de 18 a 22 horas, excepto los días festivos cuando se prolongaba hasta medianoche.