TORREMOLINOS (MÁLAGA), 29 Jul. (EUROPA PRESS) -
Un chatarrero encontró en la tarde-noche de ayer en una cantera de Torremolinos (Málaga) una bolsa en cuyo interior había una pistola, dos cargadores de nueve milímetros Parabellum, diversos detonadores, un temporizador y varias tarteras, así como un carnet militar sin fotografía y un papel con anotaciones en euskera sobre la manipulación de explosivos, informaron a Europa Press fuentes de la investigación.
Según indicaron las fuentes, tras descubrir una bolsa con varios efectos sospechosos, el hombre acudió con el arma y los dos cargadores a la Policía Local, que informó a su vez a la Policía, que se ha hecho cargo de la investigació. Ahora, los agentes tratan de determinar si la bolsa fue abandonada por los terroristas o si se trata de una entrega frustrada de material para un comando.
Horas después del descubrimiento, sobre las 00.15 horas, un artefacto de escasa potencia hizo explosión en una playa de Torremolinos, en las inmediaciones de un puente peatonal sobre un arroyo próximo al hotel Sol Aloha Puerto, en el barrio de La Carihuela, y que no provocó víctimas ni daños materiales. Entre el lugar donde fue hallada la bolsa y el lugar del atentado distan unos cuatro kilómetros.
El ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, afirmó hoy que del atentado ocurrido la pasada madrugada en Torremolinos y de la declaración de los detenidos del comando Vizcaya asegurando que tenían una cita el 15 de agosto en Granada, no se puede concluir que ETA tenga una estructura asentada en Andalucía.
Rubalcaba se limitó a atribuir el atentado en la provincia de Málaga a la organización terrorista y confirmó que anoche fue encontrada cerca de Torremolinos una pistola y algunos materiales para fabricar bombas, que también vinculó con la banda terrorista ETA.
El artefacto estaba compuesto por algo menos de un kilo de explosivo, según las primeras investigaciones. Desde la la Subdelegación del Gobierno en Málaga informaron de que las primeras pesquisas revelan que el artefacto se encontraba en el interior de un recipiente.
La deflagración no causó daños personales ni materiales. Desde el primer momento la Policía mantuvo un amplio cordón de seguridad en torno al lugar de la explosión. Asimismo, no existió llamada previa avisando de la colocación del artefacto ni hasta el momento se ha reivindicado su autoría.
