La campaña de la remolacha arranca el próximo día 4 con una previsión de 775.000 toneladas, según COAG

JEREZ DE LA FRONTERA (CÁDIZ), 2 (EUROPA PRESS)

La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos de Andalucía (COAG-A) presentó hoy los datos de la actual campaña de la remolacha, que arranca el próximo día 4 con una previsión de 775.000 toneladas para las 12.000 hectáreas de cultivo andaluzas.

En un comunicado, COAG explicó que la campaña se iniciará con la apertura de la fábrica de Guadalete, la única que permanece abierta tras el proceso de reestructuración del sector. Según sus datos, la superficie de remolacha en Andalucía es de 11.959 hectáreas, siendo las principales productoras Sevilla, con 8.429 hectáreas, y Cádiz, con 8.269.

Así, la organización agraria estimó que la campaña se prolongará durante unos 80 días y que logrará una producción algo superior a las 775.000 toneladas, de las que 580.000 corresponderían a Sevilla y 190.000 a Cádiz.

El responsable del sector de la remolacha de COAG-A, José Antonio García, manifestó que la organización ha trabajado "intensamente" para conseguir que la Consejería de Agricultura "aporte los complementos necesarios para garantizar el máximo de superficie de cultivo, con un precio rentable para los productores".

De este modo, el total de ingresos de esta campaña se situará "por encima de los 43 euros por tonelada" de remolacha, lo que "asegura un margen de rentabilidad para los agricultores".

PÉRDIDA DE PESO

COAG expuso que desde que se aprobó la nueva OCM del Azúcar, el sector ha vivido "un fuerte proceso de reestructuración" que provocó una "considerable pérdida de superficie, pasando de las 36.590 hectáreas en la campaña 2005/2006 a las 11.959 hectáreas actuales". Además, el cultivo sufrió una "pérdida de rentabilidad por la reducción del precio de la remolacha".

En estos momentos, COAG "ha logrado garantizar el máximo de superficie y rentabilidad de un sector del que dependen más de 1.300 familias del Bajo Guadalquivir, una comarca que ha visto cómo la Política Agraria Comunitaria también ha tenido consecuencias nefastas sobre otros sectores emblemáticos, como el algodón".

Por ello, esta organización agraria reclamó a la Administración un esfuerzo para crear un marco de estabilidad que permita mantener esta superficie, con márgenes de rentabilidad para los productores y garantizar el futuro de este cultivo y de todo el tejido socioeconómico vinculado a él.

"Estamos hablando de alrededor de 2.000 empleos, directos e indirectos, y de más de 210.000 jornales, de tal forma que apostar por el futuro de la remolacha es apostar por el empleo en las zonas rurales, en un contexto de crisis y de destrucción del mismo", concluyó.