Huelva.- La Junta desarrolla un plan de transporte para los trabajadores de los hospitales de la capital

Actualizado: martes, 11 diciembre 2007 15:16

HUELVA, 11 Dic. (EUROPA PRESS) -

La Junta de Andalucía va a poner en marcha un plan de transporte de trabajadores en el complejo sanitario que conforman los hospitales Juan Ramón Jiménez, Infanta Elena y Vázquez Díaz en la capital onubense, mediante una medida "pionera y de calado" estrechamente relacionada con el ahorro y la eficiencia energética.

Según explicaron en rueda de prensa los delegados de Salud y de Innovación, Ciencia y Empresa de la Junta en Huelva, José Ramón Pozuelo y María José Rodríguez, respectivamente, el plan consiste en un documento estratégico de planificación que permite optimizar el sistema de traslado y las condiciones de accesibilidad y movilidad desde todas las perspectivas: económicas, sociales, espaciales, temporales, energéticas y medioambientales.

La medida, que cuenta con una asignación de 60.000 euros y forma parte de una actuación de la Agencia Andaluza de la Energía que va a desarrollarse también en Córdoba, Sevilla y Jaén, tiene por objeto aumentar la eficiencia del actual sistema de transporte, lo que pasa por modificar los hábitos de los trabajadores, circunstancia que únicamente será viable si se propone un conjunto de alternativas válidas y atractivas.

Los delegados detallaron las tres fases de que se compone el plan, la primera de las cuales se corresponde con una toma de datos en la que se caracteriza, por un lado, el centro de actividad en cuanto a empleados, número de visitantes, distribución diaria y estacional, así como la ubicación del mismo y la situación del viario. Por otra parte, se registran las políticas de apoyo al transporte público del centro de actividad y el número de vehículos privados que llegan diariamente al mismo, junto a la cantidad de ocupantes.

Como resultado de esta primera fase, se obtienen tanto las pautas de movilidad como la satisfacción de los modos de transporte utilizados y las sugerencias de los trabajadores para mejorar el actual sistema, de forma que, en una segunda fase, puedan diseñarse sobre esta base propuestas de actuación.

En la última etapa del plan se decidirán las medidas necesarias para satisfacer los objetivos del mismo, tanto desde el punto de vista técnico como económico. Estas disposiciones son variadas y abarcan iniciativas asociadas al transporte público y colectivo (ampliaciones o modificaciones de itinerarios de las líneas de transporte, nuevas líneas exclusivas para trabajadores, ajustes de horarios y frecuencias, nuevos puntos de parada); a los vehículos privados (agrupamientos para compartir coche, incentivos para la utilización del coche compartido, restricciones para aparcar vehículos con un único ocupante); a los aparcamientos (gestión adecuada de la oferta, aplicación de tarifas); a la política de transporte que sigue el propio centro (incentivos económicos para el uso del transporte público, creación de la figura del director de movilidad); o al uso de bicicletas para acceder al centro (establecimiento de carriles bici, aparcamiento específico).

Asimismo, se definen una serie de indicadores para realizar el seguimiento del plan y el grado de consecución de los objetivos. Estas tres fases se completan con una etapa de sensibilización e información a los trabajadores, que se iniciará justo antes del proceso de encuestación y permanecerá en paralelo a la ejecución del trabajo.

LOS BENEFICIOS.

Los beneficios de la aplicación de un Plan de Transporte son evidentes tanto para el centro de trabajo, puesto que se mejora la productividad, la puntualidad y la accesibilidad; como para los trabajadores, ya que se reducen los costes y el tiempo empleados, al tiempo que se evita el estrés que provocan los atascos. También beneficia a la sociedad en su conjunto, en cuanto a la disminución del consumo de energía y la reducción de emisiones contaminantes.

En estos momentos se han iniciado los trabajos iniciales por parte de la consultora encargada de llevar a cabo el Plan de Transporte, que tiene un horizonte de ejecución de seis meses.

Ésta no es la primera actuación conjunta que emprenden las delegaciones provinciales de Innovación y Salud en materia de ahorro energético. Así, desde la Agencia Andaluza de la Energía se han incentivado proyectos de ahorro energético y de uso de las energías renovables en los hospitales Juan Ramón Jiménez, Infanta Elena y Riotinto que permiten a estos complejos sanitarios ser más respetuosos con el medio ambiente y más eficientes en cuanto a consumos energéticos.