HUELVA 28 Oct. (EUROPA PRESS) -
La cinta 'La buena vida' (Chile, 2008), de Andrés Wood, elegida por Chile para medirse junto a las escogidas por el resto de países para optar en la próxima edición de los Premios Goya a la categoría de Mejor Película Extranjera, formará parte de la Sección Oficial a Concurso por el Colón de Oro en la 34 edición del Festival de Cine Iberoamericano de Huelva, junto a los largometrajes 'Última parada 174' (Brasil, 2008), de Bruno Barreto; y 'Perro come perro' (Colombia, 2007), de Carlos Moreno, preseleccionados estos últimos por cada uno de sus países para optar al Óscar a la Mejor Película Extranjera.
Según explicó en una la organización del festival, la película de Wood -'La buena vida'- está basada en una idea original de Rodrigo Bazaes que, partiendo de un documental sobre una peluquería en el centro de Santiago de Chile, mostró a su director el alma de una ciudad plagada de historias que contar, como las de los cuatro personajes que se entrecruzan en la historia: Teresa, una psicóloga que quiere salvar vidas; Edmundo, un peluquero que quiere comprarse un coche; Mario, un joven que desea entrar a formar parte de la Filarmónica; y una mujer que se dedica a sobrevivir.
El director de cine y televisión, guionista y escritor Miguel Littin es otro de los nombres que han hecho posible esta coproducción en la que han tomado parte Chile, Argentina, España, Francia y Reino Unido, y en esta ocasión, el que fuera premiado en la 31 edición del Iberoamericano con el Colón de Oro por el largometraje 'La última luna' y el Colón de Plata por la dirección de esta misma cinta, se sitúa al frente de la fotografía de 'La buena vida'.
Su director, Andrés Wood, ya obtuvo en la 23 edición del Festival de Cine Iberoamericano de Huelva una mención del jurado por el filme 'Historias del fútbol' (1997), su primer largometraje, y con el que cosechó un éxito masivo ya que unas 55.000 personas lo vieron en Chile, exhibiéndose con gran audiencia de público en países de Iberoamérica, Estados Unidos, Canadá, Australia, Francia y España.
No obstante, su trabajo más conocido es 'Machuca' (2004), presentado en el Festival de Cannes, y que también estará presente en el certamen Iberoamericano, siendo uno de los ocho seleccionados para ser proyectados en la sección que éste acogerá con motivo de la entrega del premio 'Ciudad de Huelva' al productor, distribuidor y exhibidor Enrique González Macho.
La brasileña 'Última parada 174', de Bruno Barreto, entra a formar parte de la Sección Oficial a Concurso precedida por su designación como representante de su país para poder optar a competir en febrero por los Premios de la Academia de Cine de Hollywood. Elegida entre 14 producciones, la cinta sigue los pasos de 'O ano em que meus pais saíram de férias' (2006), de Cao Hamburger, título seleccionado por el Ministerio de Cultura brasileño para concursar por el citado galardón en 2008 y que en la anterior edición del Iberoamericano también optó al Colón de Oro.
El submundo de las favelas y el crimen de Río de Janeiro y las vidas de personajes marginales, centran la película de Barreto, basada en un episodio real de la historia contemporánea brasileña: el secuestro de un autobús 174 a manos de un delincuente en enero de 2000 que terminó con la muerte de la última de las rehenes y del secuestrador, y cuyo trágico desenlace fue transmitido en directo por la televisión.
Así, 'Última parada 174', como su propio director indica, es un filme sobre la condición humana, centrada en las sensaciones y sentimientos de una madre que pierde a su hijo y de un hijo que pierde a su madre.
Forman también parte del equipo técnico del largometraje el guionista Braulio Mantovari --'Ciudad de Dios' (2002), de Fernando Meirelles y Kátia Lund-- y, como director de fotografía, Antonine Herbelé, de 'Paradise Now' (2005), de Hany Abu-Assad.
'Perro come perro' es la última de las producciones preseleccionadas por su respectivo país, Colombia, para competir por el Óscar a la Mejor Película Extranjera que entra en la Sección Oficial del certamen. La ópera prima de Carlos Moreno mezcla varios géneros cinematográficos para contar una historia de venganza que llega al Iberoamericano tras ser exhibida en la sección Horizontes Latinos de la pasada edición del Festival Internacional de Cine de San Sebastián.