Huelva.- UGT apuesta por sanciones más "contundentes", incluso de cárcel, para bajar los índices de siniestros en 2006

HUELVA 14 Ene. (EUROPA PRESS) -

El secretario de la Federación de Metal, Construcciones y Afines (MCA) del sindicato UGT en Huelva, Sebastián Donaire, apostó hoy por arbitrar medidas "más contundentes", entre las que contempló la pena de cárcel, para castigar los incumplimientos en materia de seguridad laboral.

En declaraciones a Europa Press, Donaire recordó que el año 2005 se ha cerrado con un balance de cuatro muertos y tres heridos graves en accidentes laborales registrados en el sector de la construcción en la provincia de Huelva, por lo que consideró "prioritario" que estos índices desciendan en el presente año 2006.

En este sentido, apostó por "medidas más contundentes porque las sanciones estimadas llevan a algunas empresas a tenerlas contempladas incluso en sus cuentas de resultados, por lo que hay que endurecerlas hasta el punto de que, en los casos de claro incumplimiento de la ley, haya pena de cárcel porque no podemos seguir mirándonos con cara de tontos mientras mueren compañeros".

Con todo, lamentó que, de momento, en los primeros días del año, "se mantenga la dinámica con la que se cerró el anterior", que llevó a UGT a, además de presentar la correspondiente denuncia ante la Inspección de Trabajo referente al accidente laboral en cuestión, esta denuncia ha sido remitida a la Fiscalía y al Defensor del Pueblo para que éste, a su vez, "traslade a la Justicia su denuncia en el caso de que perciba que pueda haber delito".

Además, precisó que el último accidente laboral registrado en Huelva, en el que falleció un trabajador de Lepe, "también llamamos a la Policía Judicial para que hiciese un informe sobre las condiciones laborales en las que se produjo el siniestro y lo remitiese a la Fiscalía".

No obstante, lamentó que, "aunque nosotros utilizamos todas las armas legales que están en nuestras manos, no podemos legislar ni aplicar la ley, que es potestad de las administraciones y de la justicia" e incidió en que uno de los principales problemas del sector es la "escasez de inspectores que, a pie de calle, velen por que se cumplan las normas de prevención y lograr que los índices bajen lo máximo posible".

VIGILANCIA Y DISUASION

A su juicio, "la vigilancia es un arma disuasoria que podría tener muy buenos resultados si existen inspectores especializados en la construcción que vigilen el cumplimiento de la ley de prevención de riesgos laborales, que es muy buena, pero que no se aplica ni se cumple".

De la misma forma, apuntó a la necesidad de que el Gobierno "regule por ley la subcontratación para establecer qué empresas pueden optar a la realización de obras con garantías de que se cumpla la ley de prevención de riesgos, así como otros aspectos laborales como las condiciones o los convenios con los trabajadores".

Otro de los aspectos que Donaire resaltó como "importantes para mejorar el sector" es la anticipación de la jubilación a los 60 años, por considerar que, a esta edad, "los trabajadores ya no tienen los mismos reflejos para realizar un trabajo de permanente esfuerzo como es la construcción".

En este sentido, apuntó que en España existen unos 14.000 trabajadores en estas condiciones a los que se les podría aplicar el mismo coeficiente reductor que se estima en sectores como la pesca y la minería para que se puedan jubilar sin sufrir merma en su percepción salarial.

Donaire reconoció que "algo se está avanzando entre las administraciones, los empresarios y los sindicatos", pero resaltó que "debe haber una mayor concienciación e interés por acabar con esta lacra que, aunque es muy difícil de eliminar, sí se puede paliar lentamente".