HUELVA 6 Mar. (EUROPA PRESS) -
Un familiar directo de los cuatro acusados en primer lugar por su presunta implicación en los altercados ocurridos el pasado fin de semana en la barriada de La Orden en Huelva, Angélica Carro, apuntó hoy que los hechos ocurrido son "lamentables" y que está "deshecha", pero no quiere que "paguen justos por pecadores".
En rueda de prensa en la calle Gonzalo de Berceo, la hermana e hija de los cuatro acusados, que se encuentran en prisión preventiva desde el pasado martes, rodeada de vecinos con pancartas que pedían justicia y mostrando las fotos que han sido presentadas ante el juez, dio lectura a un manifiesto en el que declaró que lo que esta familia quiere es que "estos sucesos se aclaren y que los culpables paguen por lo que hicieron".
En este sentido, pidió que la justicia "haga su trabajo, que investigue lo ocurrido y, cuando llegue al final, los responsables sean castigados", a lo que añadió que no entiende que una familia entera "esté en prisión porque les carguen toda la culpa de lo ocurrido, de la quema de los coches y de los contenedores y de las agresiones a los policías".
Carro mantiene que su familia "no agredió a nadie" y que "no llevaban armas, ni palos, ni bates de béibol" y aseguró que es "incomprensible que una mujer de 49 años, que mide un 1,50 metros, pueda hacer a unos agentes, suficientemente preparados, todo lo que se ha dicho".
Así, Angélica Carro señaló que es "inaudito que se acuse a mi padre de tirar una maceta desde un balcón a 200 metros hacia donde se encontraba el Policía y acierte" e indicó que "cuando se produjo la detención de mi hermano sólo había seis o siete personas en la calle y no 70 u 80 como aparece en el atestado de la Policía" y recalcó que sus padres "sólo querían hablar con los agentes".
En otro orden de cosas, la defensa de estos cuatro detenidos, Ángel Llamas, presentó el pasado jueves ante el juez pruebas testificales y fotográficas a favor de sus clientes, después de que el Juzgado de Instrucción número 4 de la Audiencia Provincial de Huelva decretara prisión preventiva para estos cuatro imputados. Sin embargo, no se aventuró a dar fechas para obtener el resultado del recurso presentado.
Los delitos por los que se les imputan son los de atentado contra agentes de la autoridad y contra el orden público, lesiones y daños con medios peligrosos a los agentes y a vehículos oficiales y, a uno de los detenidos, se le atribuye a su vez un delito de resistencia a la autoridad.
Por último, Angélica Carro apuntó que la familia "no debería estar acusada de desorden público, ya que ésto se produjo después de la detención", a lo que añadió que "algún vecino podría haber grabado los hechos", por lo que pidió públicamente "una copia de ese vídeo para presentarlo ante el juez y, así, aclarar los sucesos, porque es injusto que mi familia esté en la cárcel".
Los hechos se desencadenaron cuando a las 12,30 horas del pasado domingo dos de estos agentes patrullaban por la citada calle y, tras observar a dos personas que les resultaron "sospechosas", les pidieron que se identificaran. Tras comprobar que los dos eran hermanos, uno de ellos salió corriendo huyendo de los agentes.