HUELVA, 29 Nov. (De la enviada especial de EUROPA PRESS, Lourdes Pino) -
La presidenta de la Junta y candidata del PSOE-A a la reelección en las elecciones del 2 de diciembre, Susana Díaz, ha manifestado este jueves que no le preocupa la querella que Vox ha interpuesto contra ella en el Tribunal Supremo, sino que ese partido "defienda políticas y discursos que son racistas, xenófobos, homófobos y que justifican la violencia hacia las mujeres", y que PP y Ciudadanos hayan "blanqueado" a esa formación y ahora estén incluso dispuestos a pactar con tal de "frenar" al PSOE.
En declaraciones a los periodistas en Huelva en el penúltimo día de la campaña electoral, Díaz ha indicado que fueron los presidentes del PP, Pablo Casado, y de Ciudadanos (Cs) , Albert Rivera, los que al inicio de la campaña decidieron "blanquear" a esa formación. "Cuando blanquearon a la extrema derecha es porque estaban pensando en ligar sus votos y en el día de ayer ya dijeron que si necesitan los votos de la extrema derecha, pues cualquier cosa con tal de ir contra el PSOE-A", ha indicado Susana Díaz.
Ha insistido en mostrar su preocupación por que PP y Cs estén dispuestos a sumar sus votos a los de un partido que tiene un discurso "xenófobo, machista, que justifica la violencia contra las mujeres y que enfrenta a los ciudadanos y a los territorios y que además quiere mutilar nuestra autonomía y autogobierno".
Después de que el expresidente del Gobierno José María Aznar haya señalado que no puede decir que la actual dirigencia del PSOE sea una fuerza constitucional, la presidenta de la Junta ha expresado que ya "lo que le faltaba" a esta campaña es que el expresidente saliera hablando de "cómo tenía que hacerse el bloque entre el PP, Cs y lo demás, que es Vox".
Ante este panorama, la presidenta de la Junta ha hecho un llamamiento a los andaluces para que el domingo acudan a votar masivamente y se escuche con claridad la voz de la voluntad ciudadana en unos momentos en los que algunos han querido normalizar "esto de bloquear instituciones y de despreciar el voto antes de que se acuda a votar, incluso no descartando que se tengan que repetir elecciones".
Asimismo, ha garantizado que si tiene la confianza mayoritaria de los andaluces, el día después llamará a todas las fuerzas políticas que estén "en el respeto a la democracia, a la convivencia, al orden constitucional, al respeto a nuestro Estatuto, porque Andalucía es lo más importante y nadie debe frenarla ni bloquearla". "Procuro no insultar ni faltar a nadie porque quiero al día siguiente seguir siendo la presidenta de todos los andaluces", ha recalcado.
"FALTA DE AUTONOMÍA" DE MARÍN
En cuanto a las manifestaciones del candidato de Cs a la Junta, Juan Marín, relativas a que estarían "encantados" de contar con los votos de Vox, Susana Díaz ha aludido a la falta de autonomía de su exsocio de investidura.
Tras reconocer que siente mucho cariño y afecto por Marín , Susana Díaz ha lamentado, no obstante, que "la falta de autonomía ha hecho que Rivera tirara por la borda" la contribución de Cs durante esta última legislatura a la gobernabilidad en la comunidad, lo que es una manera "de impugnar" ese trabajo.
"Cuando no se tiene autonomía, a veces le hacen a uno recitar una obra que no es suya y eso es lo que le está pasando: está actuando y está poniendo en escena una obra que ni se cree y se le nota", según ha dicho Díaz en referencia a Marín.
Se ha referido al hecho de que lo subieran al autobús "infame" que, por ejemplo, le llevó el pasado lunes al debate electoral de RTVE --donde se podía leer 'Stop PSOE. Se ríen de España, se ríen de ti', con fotos de ella, de Pedro Sánchez, de Carles Puigdemont y de Oriol Junqueras-- y que, en opinión de Díaz, "recuerda al 'tramabus' de Podemos o al de Hazte Oír".
"Ese tipo de cosas, para alguien a quien tengo cariño, no me gustan", ha apuntado la presidenta, quien ha lamentado que Marín también se sume a "blanquear a la extrema derecha", algo que es un poquito "más llamativo y preocupante".
La presidenta ha querido dejar claro que ella no quiere "depender de nadie ni deber nada a nadie, solo a los andaluces", y ha recalcado que el domingo no solo va de ganar, sino "de ganar bien para que nadie nos bloquee ni pare a Andalucía.
BALANCE DE CAMPAÑA
En cuanto a su balance de la campaña, ha indicado que ha sido muy intensa, con muchas horas y kilómetros, pero que se siente "muy contenta y feliz" por el trabajo realizado. Ha indicado que ha transmitido propuestas a los andaluces, que quieren un horizonte de esperanza, de empleo de calidad , de recuperar derechos, de igualdad y de que nadie se quede en el camino.
Ha agregado que ha llegado a la campaña con los deberes hechos y con un programa que se le quedó "chico" porque se han hecho más cosas de las que prometió en las anteriores elecciones autonómicas.
Susana Díaz ha insistido en que ha sido una campaña bonita, en positivo y de alegría de la que se siente contenta y ha confiado en que los andaluces acudan el domingo a votar masivamente para que se escuche con claridad la voz de la voluntad ciudadana.
Respecto a la suspensión el pasado jueves de su acto de campaña en San Juan de Aznalfarache (Sevilla) por una violenta protesta de taxistas, ha indicado que la violencia nunca debe utilizarse "para arañar un puñado de votos" y que ella hubiera preferido que todos los partidos condenaran con claridad ese tipo de actuaciones, "porque la violencia no cabe en democracia".
Ha apuntado que cuando un colectivo tiene derecho a reivindicar sus problemas u oportunidades y recurre a la violencia, "pierde esa legitimidad". Ha añadido, no obstante, que esa protesta no fue todo el colectivo de taxistas, sino de un grupo de violentos.
